El príncipe Felipe despide al hombre que le pidió que rompiera con Eva Sannum

Fue el hombre encargado de aconsejar al príncipe Felipe que pusiera fin a su relación con la noruega Eva Sannum, a petición de don Juan Carlos. "A la persona que debía elegir tenía que saber que no podía divorciarse y que tenía el mejor ejemplo en su madre. No sé si mi conversación le sirvió de algo, pero meses más tarde puso fin a su relación con la noruega", le comentó Gregorio Peces-Barba, uno de los padres de la Constitución, allá por 2001, cuando medio país debatía sobre la conveniencia o no de que don Felipe pudiera casarse con una plebeya extranjera. Este martes, don Felipe acudía a la capilla ardiente del expresidente del Congreso y rector fundador de la Universidad Carlos III, quien fallecía a los 74 años después de que no superara una insuficiencia renal que se complicó con otra cardíaca y por la que fue ingresado el pasado 16 de julio en el Hospital Universitario Central de Asturias de Oviedo.

El príncipe de Asturias ha lamentado la pérdida "para España y para la Corona" del que considera "un servidor público de enorme ejemplo en tiempos difíciles". Lo hacía a su llegada a la capilla ardiente con los restos mortales de Peces-Barba, instalada en su domicilio de la localidad madrileña de Colmenarejo, donde se acercaba sin su esposa, Letizia Ortiz, pasadas las nueve y media de la mañana con el fin de dar el pésame a la familia y despedir a quien le tomó juramento como presidente de la Cámara Baja en el año 1986, "un momento muy importante, muy simbólico y muy emocionante", que salía a relucir cada vez que se ambos se encontraban, según el benjamín de los reyes.

Para don Felipe, Gregorio Peces-Barba no tenido un papel esencial en el aspecto personal de su vida, ejerciendo en aquella ocasión de consejero, sino también en el plano político, pues el político solía reunirse tanto con don Juan Carlos como con su hijo con el fin de contribuir en la preparación del príncipe de cara a la sucesión y en la conversión en un futurible rey del siglo XXI. La importancia de Peces-Barba en la vida de la corte se hacía extensible también a su condición de salvaguarda de la institución monárquica, tendiendo continuamente puentes entre ésta y el Gobierno en momentos harto complicados de la historia patria. Su férrea defensa de la monarquía le ha llevado a mantener siempre que el rey no tiene negocios privados, una actitud que contrarresta con la que adoptó tras conocerse los del duque de Palma,iñaki Urdangarin. "El rey advirtió a Urdangarin, pero al yerno le entró por aquí y le salió por ahí", confesó recientemente en el programa Salvados.

El jurista, que protagonizó numerosos titulares después de reconocer que había aconsejado al príncipe que rompiera con Sannum y que eligiera a una española, fue "siempre generoso en sus expresiones, siempre estaba dispuesto a escuchar y a comentar con transparencia y con libertad cualquier asunto", incluido el de la relación de éste y la noruega. Don Felipe ha añadido, además, que aunque no le dio clases directamente, siempre consideró a Peces-Barba "un profesor y una fuente de conocimiento y aprendizaje".

A la casa familiar del que fuera alto comisionado para la Atención a las Víctimas del Terrorismo y veterano socialista acudían desde primera hora de la mañana a darle el último adiós importantes rostros del mundo de la política, la abogacía y de diferentes ámbitos sociales como Adolfo Suárez Illana; el ministro de Cultura, José Ignacio Wert; el socialista Alfonso Guerra; Tomás Gómez; el coordinador general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo; el político y jurista Antonio Garrigues Walker; la Defensora del Pueblo, Soledad Becerril; y el presidente del Congreso, Jesús Posada, entre otros.

La Familia Real no irá al entierro

Pese a que este miércoles, el príncipe Felipe no tiene actos oficiales previstos en su agenda, no se espera su presencia en el entierro de Peces-Barba, que tiene lugar a la una de la tarde en el cementerio de Colmenarejo. Tampoco está previsto que acuda ningún otro miembro de la Familia Real, tal y como han confirmado fuentes de Zarzuela a Vanitatis. De hecho, los reyes ya enviaron este martes un telegrama de condolencia a la familia, en el que destacaban su aportación a la democracia en España y destacaban su trayectoria, así como lo que ha supuesto para los derechos humanos. Los príncipes, por su parte, se han sumado a la iniciativa y han enviado otro mensaje y una corona de flores, que don Felipe apoyaba después con su presencia en la capilla ardiente.