El Príncipe y Urdangarin, 'juntos pero no revueltos' durante la final del Mundial de balonmano

Domingo por la tarde. Mientras toda España está pendiente de la final del Campeonato del Mundo de balonmano que enfrenta a España y Dinamarca, dos espectadores muy significativos están sentados en los palcos del Palau Sant Jordi. Ni más ni menos que el Príncipe Felipe e Iñaki Urdangarín que, por unas horas comparten la misma emoción que millones de españoles pero sentados en lugares muy diferentes. Diferentes son también sus compañías. Mientras que Iñaki Urdangarín, vestido de manera informal con una camisa de cuadros, disfruta de la victoria de nuestro país al lado de sus hijos, que no dejan de saltar efusivamente cada vez que España marca un tanto, el Principe hace lo propio junto a la princesa Marie de Dinamarca, Federico y al ministro José Ignacio Wert.

¿Estrategia para que no los fotografíen juntos? Desde Casa Real, con la que Vanitatis se pone en contacto, prefieren no hacer declaraciones. “Puede que se encuentren en el interior del pabellón, pero en principio no vamos a hacer ninguna declaración sobre ese asunto”, aseguran de forma escueta. La curiosidad del encuentro es que coincide con un momento en el que el duque de Palma y Casa Real se han alejado más que nunca. El sábado se suprimía la ‘sección personal’ con la que contaba Iñaki Urdangarín en la web oficial de Casa Real. Las argumentaciones parecían de una lógica aplastante: desde diciembre de 2011 se le había apartado de cualquier actividad oficial que tuviese que ver con la Familia Real y este era un paso más para reforzar la idea de que su “conducta no ejemplar” seguía siéndolo de cara a la institución. El único rastro que queda del duque en la página web es su nombre y su imagen como esposo de Doña Cristina y como duque de Palma.  Así se cumple lo que se dijo en diciembre de 2011, cuando se aseguró que “la institución de la Corona y de la Casa del Rey están al margen de la familia”.  Sin embargo, la exclusión de Urdangarín de la web está ligada, para muchos y de manera irrefutable, con los correos electrónicos dados a conocer esta semana por su exsocio, Diego Torres.

Y es que José Castro ha citado a declarar a Urdangarín y a Diego Torres nuevamente el próximo 23 de febrero en los juzgados de Palma por presuntos delitos contra la Hacienda Pública por fraude fiscal de, al menos, 470.000 euros en 2007 y 2008. El ‘caso Nóos’ sigue adelante y, además, uno de los correos mostrados por Torres, que también implican al secretario de las infantas, Carlos García Revenga, en el que el duque se despide como “El duque em… Palma… do” habrían terminado por marcar las distancias. Las del  príncipe y el duque parece que siempre estuvieron muy claras.

Alejados pese a compartir familia

El 25 de noviembre, Urdangarín acudía al hospital Quirón San José de Madrid para visitar a un convaleciente don Juan Carlos, que se recuperaba de su operación de cadera. La visita reabría el debate: ¿había cambiado la actitud de la Familia Real con respecto al duque de Palma? Sin embargo, ya se dijo en su momento que el Príncipe había puesto una condición para que se efectuase tal visita: no coincidir en ninguna fotografía ni con su hermana, la infanta Cristina, ni con el duque de Palma. Y esa fotografía jamás se produjo a pesar de que Urdangarin y la infanta Cristina acudieron al hospital acompañados por la infanta Elena y la Reina doña Sofía. Ya cerca de la Navidad asaltó de nuevo la duda sobre la actitud de Zarzuela con el duque de Palma cuando la princesa de Asturias, emblema de la monarquía futura, impoluta y alejada de la corrupción coincidía en la misma foto con la infanta Cristina y sus hijos a la salida de una función del musical ‘Sonrisas y lágrimas’.

El príncipe no estaba aquel día pero siempre parece haber destacado como el miembro de Zarzuela que más ha mantenido las distancias con el duque para no verse salpicado por el ‘caso Nóos’ y todo lo que ha supuesto para la institución monárquica. Algunos piensan que ese alejamiento ha provocado situaciones extremas. Lo recordaba Iñaki Anasagasti en una entrevista efectuada por este portal con motivo del 45 cumpleaños del Príncipe: “La huida de ese tema lo ha llevado a extremos inexplicables como el momento en el que muere el padre de Urdangarín y nadie de Zarzuela acude a verle. Me parece mal porque no deja de tener una hermana que se llama Cristina a la que debería apoyar en esos momentos”

Sea como sea, el Príncipe e Iñaki Urdangarín prefirieron mantenerse alejados pese a compartir la misma emoción: la de ver ganar a España un Mundial de balonmano. Y quizá en otros tiempos no habrían tomado la decisión de permanecer ‘juntos pero no revueltos’. En esta ocasión, parece que mandan las circunstancias.