Pablo Nicolás cumple los 13 en el refugio suizo de sus padres

En los últimos años, la celebración de cumpleaños del segundo hijo de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin ha sido, cuanto menos, agridulce. A pesar de que los duques de Palma han intentado que sus cuatro hijos vivan ajenos a la polémica que ha generado la implicación de su padre en el caso Nóos y la fugaz imputación de la infanta, lo cierto es que ambos han intentado desde el principio que sus hijos accedan lo menos posible a internet y que novean la televisión para que no conozcan cuáles son las dimensiones de todo lo que hasta ahora ha ocurrido.

Este viernes, Pablo Nicolás Urdangarin celebraba sus 13 años en compañía de sus padres y sus tres hermanos en Ginebra, donde la familia reside desde el mes de agosto. También acudían la Reina en compañía de la infanta Elena y su hijo Froilán.

A pesar de que se conoce muy poco sobre la personalidad de los hijos de los duques de Palma, lo cierto es que Pablo es "el más extrovertido de los cuatro",según narran fuentes cercanas a la familia en declaraciones a Vanitatis. Siempre sonriente y con un buen gesto cuando hay cámaras cerca, el segundo hijo de la infanta es "un apasionado de los deportes". Como para el resto de sus primos, el esquí y la vela son casi de obligado cumplimiento. De hecho, este verano la Reina Sofía pagó a sus nietos un curso de 250 euros en la Escuela Nacional de Vela de Calanova para que se iniciaran en el mundo de la vela. Durante este curso, la actitud de Froilán volvió a dar un nuevo quebradero de cabeza parala infanta Elena ydoña Sofía. Pablo Nicolás se convirtió en el blanco del enfado del nieto mayor de los Reyes propinándole un cabezazo e intentado clavarle un pincho moruno.

Siguiendo los pasos de su padre,el balonmano también es una de sus pasiones. El pasado mes de abril, varios reporteros gráficos pudieron captar cómo la infanta Cristina y su marido se convirtieron en los protagonistas de un partido que disputó Pablo Nicolás junto a sus compañeros de equipo del Liceo Francés. A principios de año y junto a su padre y a su hermano Miguel, acudió a la semifinal y a la final del Mundial de Balonmano que se celebró en Barcelona, momento este último en el que coincidieron con el príncipe Felipe y en el queno hubo saludo, ni tan siquiera entre tío y sobrinos.

Las últimas fotografías de Pablo Nicolás muestran una muy buena relación con sus primos, a pesar del incidente con Froilán, y una conexión especial con su madre, a la que no duda en abrazar y besarincluso cuando las cámaras captan todos y cada uno de sus movimientos en Ginebra. Con sus hermanos, especialmente con Irene, de 8 años, mantiene la misma unión y son los únicos que muestran abiertamente el cariño que se profesan.

Tres mudanzas en cuatro años

Iñaki Urdangarin y la infanta siempre han mostrado la mejor de sus sonrisas cuando están con sus hijos. Desde que la familia se trasladara en agosto de 2009 a Washington después de que Telefónica ascendiera a Urdangarin a consejero y presidente de la Comisión de Asuntos Públicos de Telefónica en Latinoamérica y Estados Unidos, sus hijos han tenido unos cumpleaños en los que han estado lejos de sus primos y abuelos. Sin embargo, la Reina ha intentado salvar la distancia en este sentido en dos ocasiones. La primera, a principios de diciembre de 2011 con motivo del 11º cumpleaños de Pablo Nicolás y sólo unos días antes de que se produjera la imputación de Iñaki Urdangarin. La segunda, en abril del año pasado para soplar las velas junto a su nieto Miguel, que cumplía 10 años.

A finales de agosto de ese mismo año, Iñaki Urdangarin solicitó una excedencia temporal en Telefónica y regresó junto a su mujer y sus cuatro hijos a la vivienda familiar de Barcelona. A pesar de que su traslado dio cierta normalidad a la vida de sus hijos al regresar al mismo colegio en el que estudiaron antes de su traslado a Estados Unidos y volvieron a retomar un mayor contacto con sus primos, el cumpleaños de Pablo Nicolás en 2012 fue un claro intento de escenificar una unión en el seno de la Familia Real. Aun así, el Rey, convaleciente de la operación de la cadera izquierda de la que fue intervenido en noviembre de 2012, y los Príncipes de Asturias, que continúan con la idea de distanciarse de los duques de Palma, y sus hijas fueron los grandes ausentes.

Sólo ocho meses después, Pablo Nicolás y sus hermanos Miguel, Juan Valentín e Irene, volvieron a empaquetar su vida con destino a Suiza, donde disfrutan de una educación de lujo -la infanta se hace cargo de los más de 100.000 euros que cuesta- en el Colegio Internacional de Ginebra y en el que los cuatro continúancon suformación en francés.