La princesa Corinna reaparece en el funeral de Mandela junto a Charlene de Mónaco
Se sumó este martes a la multitudinaria ceremonia de despedida a Nelson Mandela celebrada en Johannesburgo, como parte de la comitiva de los príncipes de Mónaco
Corinna vuelve a acaparar todas las miradas. La princesa alemana se sumó este martes a la multitudinaria ceremonia de despedida a Nelson Mandela celebrada en el estadio de Johannesburgo, como parte de la comitiva personal de los príncipes de Mónaco. Hace varios meses que no pisa suelo español y parece haber roto lazos con los Borbón, a la vez que ha afianzado su relación de amistad con la princesa Charlene de Mónaco a la que asesora en cuestiones de imagen y acompaña en sus viajes al extranjero.
Políticos de primer nivel de distintos países, miembros de diversas casas reales y numerosos rostros conocidos del mundo del espectáculo quisieron estar presentes en el último adiós al primer presidente negro de Sudáfrica. Una ceremonia en la que la nota de color ha venido de la mano de la “amiga entrañable” del Rey don Juan Carlos, entre los tediosos discursos políticos y el frío que ha caracterizado la velada.
Una relación que viene de lejos
El pasado mes de octubre sorprendió la presencia de Corinna en Rusia, donde los príncipes de Mónaco viajaron para estrechar su relación con los dirigentes del país. Vestida de riguroso negro, la que fuese compañera de caza del Rey en Botsuana no dudó en posar ante las cámaras con los dirigentes monegascos y el patriarca ortodoxo de Moscú.
Su vinculación a Alberto de Mónaco viene de lejos, ya que es amiga del príncipe desde hace años. Fue una de las invitadas a su boda con Charlene. Mucho se ha especulado desde entonces acerca de la notoria ausencia de algún miembro de la Familia Real española. Por aquel entonces todavía no se había destapado ningún tipo de conexión entre la princesa alemana y el monarca español, pero pasados los años todo parece indicar que evitaron cruzarse con ella.
Pese a su sorprendente vinculación amistosa con Alberto, es a Charlene a la que la princesa ha asesorado en varias ocasiones. A principios de octubre viajó a Nueva York, ciudad a la que habían viajado Alberto y Charlene y donde él participó en la Asamblea General de Naciones Unidas. Además, la princesa posee una casa con vistas al mar en Montecarlo, lo cual la convierte en una presencia habitual en los círculos en los que también se mueven los Grimaldi. El lugar exacto de su residencia, en la que vive cuando no está en la Gran Manzana, son los apartamentos ‘Le Montaigne’, cuyos precios oscilan entre los 10.000 y los 15.000 euros de alquiler.
Corinna vuelve a acaparar todas las miradas. La princesa alemana se sumó este martes a la multitudinaria ceremonia de despedida a Nelson Mandela celebrada en el estadio de Johannesburgo, como parte de la comitiva personal de los príncipes de Mónaco. Hace varios meses que no pisa suelo español y parece haber roto lazos con los Borbón, a la vez que ha afianzado su relación de amistad con la princesa Charlene de Mónaco a la que asesora en cuestiones de imagen y acompaña en sus viajes al extranjero.