Magdalena de Suecia y Chris O' Neill ya están en casa junto a su hija recién nacida

Magdalena de Suecia y Chris O’ Neill ya están en casa en compañía de su hija. La princesa salía este domingo del hospital junto a la recién nacida y posaba al lado de su marido para realizar una fotografía que posteriormente ha sido subida a las redes sociales. Este ha sido el modo de dar la noticia que ha elegido la pareja, despejando así las dudas sobre si posarían a la salida del hospital en compañía de la pequeña o no. Ambos iban vestidos de manera sencilla, con abrigos oscuros y con una gorra neoyorkina en el caso de él.

Dos días antes, el nacimiento de la hija de Magdalena de Suecia y Crhis O’ Neill en Nueva York levantaba una gran expectación en la ciudad de los rascacielos, donde la realeza es vista con cierta lejanía curiosa. A las 12 de la mañana del viernes, O’ Neill hacía las primeras declaraciones sobre el aspecto físico de su hija, asegurando que “se parece a su madre”. Además, se permitió bromear sobre la magnífica salud con la que la pequeña ha venido al mundo. “Tiene diez dedos en las manos y diez en los pies”, dijo. Para el padre de la pequeña, “sostenerla en brazos por primera vez” ha supuesto una sensación “increíble”.

Eran algunas de las palabras del financiero acompañado de la doctora que había atendido a la parturienta, que confirmó la presencia de O’ Neill, durante todo el tiempo, al lado de su esposa, pendiente de que todo saliese bien. Él mismo comprobó, en primera persona, la fortaleza de su mujer. “Es muy fuerte y ahora está descansando”, aseguró. Además, añadió que no eran pocas las fotografías que había tomado de la pequeña nada más nacer. Las declaraciones del padre de la criatura se acompañaron de una fotografía en el Facebook oficial de la Casa Real Sueca en el que se puede contemplar un pie de la niña, siendo esta la primera imagen que los suecos tienen de la pequeña.

La única pregunta que O’ Neill no pudo contestar a los periodistas fue la del nombre de la niña. Será el rey Carlos Gustavo el que tenga el honor de comunicarlo en un Consejo de Estado. Incluso la sede del gobierno sueco ondeará el 2 de marzo, durante un acto especial, su bandera en honor a la recién nacida.