La reina Silvia y la princesa Magdalena boicotean a Chuck Berry

Como cada año por estas fechas, la familia real sueca hace entrega de los premios musicales Polar, considerados los Nobel de la música. Y como cada año se esperaba la presencia de los Bernardotte al completo en el Konserthus de Estocolmo. Sin embargo, dos ausencias llamaron mucho la atención.

La reina Silvia y su hija menor, la princesa Magdalena, declinaron la invitación a la galaporque uno de los premiados era Chuck Berry, quien en 1961 fue procesado por tráfico de menores. Este rockero americano recibió una condena de tres años de prisión por querer prostituir a una joven menor que conoció en México. Él declaró que no sabía que la joven no había cumplido todavía la mayoría de edad.

A pesar de que Berry,que ahora tiene 87 años,no asistió a la gala por problemas de salud, Silvia y Magdalena, alegando el papel que representan en la fundación World Chilhood, una ONG creada por la propia reina con sede en Estados Unidos que defiende los derechos infantiles, prefirieron no asistir.

Tras el revuelo causado por este boicot, la esposa del monarca se justificó en el diario ‘Expressen’sobre su ausencia en la gala: “No podía aceptar la invitación. Debía defender los derechos de la infancia como hago, diariamente, con mi fundación. Esta decisión fue comentada con el Rey y él la entendió y aceptó. Para intentar no perjudicar a los premios tanto mi hija Magdalena como yo asistimos al banquete posterior para así honrar al otro galardonado, Stig Andersson", alegó la Reina.