Corinna frecuentaba las mejores suites cuando era amiga de Don Juan Carlos

Corinna zu Sayn-Wittgenstein (51 años) no ha pasado apuros en su vida. Princesa por la gracia de haberse casado en segundas nupcias con Casimir zu Sayn-Wittgenstein-Sayn, un aristócrata alemán del que mantiene el título y el apellido pese a que se divorciaron hace una década, desde su primer matrimonio se acostumbró a vivir bien y a rodearse de personas influyentes y con alto poder adquisitivo. Por eso, para Corinna no debía ser nada nuevo entrar a palacio cuando comenzó su amistad "entrañable” con Don Juan Carlos a finales de 2005, justo después de separarse de su segundo marido. Corinna cambió un príncipe por un Rey y la buena vida por una mejor, ejerciendo de primera dama en la intimidad y ocupando suites reales.

El día que se publica Final de partida (Esfera de los Libros), el libro en el que Ana Romero repasa los últimos años de Don Juan Carlos, Vanitatis abre las puertas de algunas de las suites que Corinna conoció gracias a su relación de amistad entrañable, por la que se embolsó 30 millones de euros.

The Mark, en Nueva York

En septiembre de 2012, Mariano Rajoy viajó a Nueva York para asistir a una reunión de la Asamblea General de la ONU. El presidente del Gobierno y todo su equipo se alojaron de The Mark, uno de los mejores hoteles de la Gran Manzana. Sin embargo, no fueron los únicos huéspedes. Tal y como ha contado a Vanitatis un fotógrafo que se encontraba entre los periodistas acreditados para cubrir el viaje, “Corinna salió del hotel una mañana a primera hora”. Estaba alojada en una suite.

Situado en Madison Avenue con la 77, a tan solo una manzana de Central Park, este hotel de cinco estrellas cuenta con quince suites decoradas de manera diferente. Varias de ellas tienen más de dos habitaciones. Dormir en una de estas habitaciones cuesta en torno a los 2.000 euros por noche con el desayuno incluido.

Emirate Palace, en Abu Dhabi

En enero de 2013, Don Juan Carlos canceló un viaje a Abu Dhabi. Aunque en ese momento se entendió que fue el propio Rey emérito quien decidió no viajar al país de Oriente Medio para atajar la crisis provocada por el ‘huracán Corinna’, Ana Romero desvela en su libro que la realidad es que el Gobierno le impidió viajar ya que la monarquía estaba en serio peligro. Prueba de que la intención del Rey emérito era desplazarse hasta Abu Dhabi es que allí le esperaba Corinna. La princesa estaba alojada en el Emirate Palace, uno de los hoteles más lujosos del mundo.

Con una arquitectura tradicional árabe, entre los privilegios de este hotel se encuentra su fantástica playa privada de más de un kilómetro de longitud. Cuenta con catorce restaurantes de diferentes comidas, un spa con suites privadas y agua de Vichy para los tratamientos, así como la posibilidad de practicar diferentes deportes como el cricket, el golf o el pádel.

Emirate Palace tiene seis suites, dos de ellas apartamentos de varias habitaciones. Por unos 2.000 euros puede alojarse una noche en este hotel de cinco estrellas y disfrutar de sus instalaciones.

The Connaught, en Londres

Agosto de 2013. El sol radiante ilumina la fachada de The Connaught, uno de los mejores hoteles de Londres. Un periodista español aguarda en la puerta a un entrevistado cuando se le cruza una flamante rubia. Es Corinna. “¡Corinna! ¿Qué hace aquí?”, le pregunta el periodista. “Vivo aquí en una suite”, contesta la princesa antes de darse cuenta de que su interlocutor pertenece a la prensa española y marcharse.

Cuando se conoció la amistad entre el Rey y Corinna, la princesa alemana se vio 'forzada'a cambiar su residencia monegasca por la capital británica. Hasta allí, según desvela Ana Romero en su libro, Don Juan Carlos se desplazaba cada tres semanas para ver a Corinna.

Se reunían en The Connaught, un hotel de lujo de cinco estrellas situado en Mayfercuyas habitaciones están decoradas por importantes interioristas británicos. El alojamiento cuenta con diez suites y un apartamento.

Tal y como destacan algunos de sus huéspedes, “aunque es caro, el servicio es excelente”. Una de sus suites, la Heaven, tiene un precio de 2.000 euros por noche con desayuno incluido en el que se puede tomar hasta champán.

Por ese precio, el huésped puede disfrutar también de un spa, apuntarse a clases de meditación o acudir al gimnasio.