La boda real de Carlos Felipe de Suecia y Sofía Hellqvist costará 650.000 euros
La casa real sueca ha hecho público el presupuesto que tiene para el enlace del príncipe y la ex stripper
Quedan unas horaspara que tenga lugar la boda real entre Carlos Felipe de Suecia y Sofía Hellqvist, y el director financiero de la casa real sueca acaba de hacer público el coste de la celebración. La organización del enlace y los festejos posteriores costarán un total de 650.000 euros. Al igual que ocurrió con los matrimonios de sus hijas, Victoria y Magdalena, el rey Carlos Gustavo ya ha comunicado que será él personalmente quien se encargará de pagar su elevado coste. A diferencia de otras familias reales como la danesa o la holandesa, cuyas celebraciones se sustentan con dinero público, el soberano sueco decidió que lo pagaría él de su bolsillo para así evitar las críticas de aquellos que no están a favor de la monarquía.
Con esos 650.000 euros de presupuesto, la casa real sueca deberá pagar toda la organización de la ceremonia y los festejos; los trajes de los caballeros; los vestidos, joyas y peluquería de las damas de la familia; los honorarios de Avicci, el conocido DJ que amenizará la fiesta posterior; y el menú entre el que destaca solomillo y marisco. Asimismo, Carlos Gustavo deberá correr con los gastos de seguridad que, según el diario Aftonbladet, podrían ascender a los 200.000 euros.
Quedan unas horaspara que tenga lugar la boda real entre Carlos Felipe de Suecia y Sofía Hellqvist, y el director financiero de la casa real sueca acaba de hacer público el coste de la celebración. La organización del enlace y los festejos posteriores costarán un total de 650.000 euros. Al igual que ocurrió con los matrimonios de sus hijas, Victoria y Magdalena, el rey Carlos Gustavo ya ha comunicado que será él personalmente quien se encargará de pagar su elevado coste. A diferencia de otras familias reales como la danesa o la holandesa, cuyas celebraciones se sustentan con dinero público, el soberano sueco decidió que lo pagaría él de su bolsillo para así evitar las críticas de aquellos que no están a favor de la monarquía.