Urdangarin les pide 75 euros a sus amigos para el cumpleaños sorpresa de Cristina
La infanta Cristina viajó sola a Barcelona por temas de trabajo y del proceso judicial y aprovechó para acudir a la finca de unos amigos, invitada a una fiesta privada. Al llegar se encontró que...
La infanta Cristina viajó a Barcelona la semana pasada. En principio, este desplazamiento tenía que ver con sus temas procesales y su trabajo en La Caixa. Aparentemente vino sola, mientras Urdangarin y los niños se quedaban en Ginebra. Aprovechó para ver a sus amistades y el domingo se trasladó hasta el Maresme, a la finca de unos amigos que celebraban la despedida de soltera de una de sus hijas. Todo dentro de la normalidad y del perfil bajo que desde Zarzuela han pedido al matrimonio que mantenga para no dañar más a la institución.
Pero sí había sorpresa y grande para la exduquesa de Palma, como ha explicado el periodista de La Vanguardia Josep Sandoval. En el campo la esperaban sus hijos y su marido, que le había organizado un cumpleaños sorpresa junto a cuarenta íntimos. Por supuesto había imperado la ley del silencio y la infanta no se esperaba que fuera ella la protagonista de la reunión festiva. Hasta el último momento pensaba que era la hija de la casa la estrella de la velada. Pero no era así. Cuando llegó se encontró con su marido, los niños y el resto del grupo que le cantaron el cumpleaños feliz. Urdangarin lo había organizado al milímetro y previamente había pedido a los amigos que contribuyeran con 75 euros para el regalo y el catering. El obsequio era una pamela y un bolso de la firma Castañer. Para que no hubiera fuga informativa, los hijos de los amigos sirvieron el cóctel, que también se preparó en casa.
No obstante, a pesar de las estrictas medidas de silencio que exigió Urdangarin para que su mujer no se enterara, finalmente trascendió la noticia, aunque no a oidos de la protagonista y sí a los del periodista Josep Sandoval.
En contra de lo que pudiera hacer pensar con la situación complicada que se presenta a los exduques de Palma, la pareja se comportó como si las imputaciones no fueran con ellos. Eso sí, lo que demostraron es que su relación afectiva funciona a la perfección, mostrándose en todo momento como una pareja enamorada.
Para la infanta Cristina fue su segunda celebración. Tuvo su cumpleaños oficial en Ginebra el 13 de junio, fecha de su nacimiento, al que acudieron la Reina Sofía, la infanta Elena, sus cuñadas Urdangarin y sus primas Cristina y Victoria de Borbón Dos Sicilias, hijas del infante don Carlos. Para festejar el medio siglo de vida la exduquesa de Palma los reunió en uno de los restaurantes más lujosos de la ciudad y cuya factura superó los 6.000 euros.
La infanta Cristina viajó a Barcelona la semana pasada. En principio, este desplazamiento tenía que ver con sus temas procesales y su trabajo en La Caixa. Aparentemente vino sola, mientras Urdangarin y los niños se quedaban en Ginebra. Aprovechó para ver a sus amistades y el domingo se trasladó hasta el Maresme, a la finca de unos amigos que celebraban la despedida de soltera de una de sus hijas. Todo dentro de la normalidad y del perfil bajo que desde Zarzuela han pedido al matrimonio que mantenga para no dañar más a la institución.