Mette-Marit y su familia se vuelcan en la entrega del Premio Nobel de la Paz

La familia real Noruega se ha volcado por completo en la entrega del Premio Nobel de la Paz que este año ha recaído en el Cuarteto para el Diálogo Nacional de Túnez. La organización de los Nobel decidió galardonarlos por "su decisiva contribución a la construcción de una democracia pluralista en Túnez como consecuencia de la Revolución de los Jazmines en 2011". Este jueves por la mañana, la princesa Mette-Marit asistía al festival Save The Children Peace Price, un espectáculo que se celebra anualmente antes de la entrega del galardón. El príncipe Sverre Magnus, el benjamín de la familia, quiso estar presente en este acto, mientras que su hermana Alexandra prefirió ir a la escuela.

Tras el espectáculo, Mette-Marit regresó al Palacio Real de Oslo para estar presente en el encuentro que mantuvieron los reyes con los premiados. A las 13:00 horas se entregaban los premios. Como ya es tradición, la princesa Mette-Marit apostó por el color blanco para su 'look'. La esposa del heredero eligió un abrigo de Alexander McQueen, que combinó con complementos en negro: salones de Louboutin, cartera de mano, guantes de piel y un cinturón muy finito para remarcar cintura. La princesa peinó su rubia melena en una trenza que decoró con una diadema negra y dorada.