La princesa Charlène abandona su retiro para homenajear a su suegra

Los actos oficiales de Charlène de Mónaco son tan escasos que cuando tiene alguno programado en su agenda inmediatamente se convierte en noticia. La princesa es conocida por sus continuas ausencias y hace unas semanas se creó una gran polémica al faltar a un evento muy especial para su marido. El príncipe Alberto viajó el pasado mes de septiembre a Nueva York para inaugurar un nuevo salón dedicado a la mítica Grace Kelly en la 'boutique' de Cartier. Este era un acto muy emotivo para el soberano, quien siempre estuvo muy apegado a su madre. Sin embargo, su esposa no quiso acompañarle a este homenaje dedicado a su suegra.

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Parece que tras las críticas recibidas, Charlène ha recapacitado y quiere ponerse las pilas. Por ello, este mismo lunes se ha desplazado junto a Alberto hasta la Gran Manzana para entregar los premios de la Fundación Princesa Grace con un vestido blanco de Dior. Esta fundación, creada en 1964 por la famosa actriz, ofrece ayuda para proyectos humanitarios destinados a los niños. Según puede verse en la página web del principado, este será el primer acto que la princesa realice desde que el 10 de septiembre participó en Génova en el Día Mundial de los Primeros Auxilios. Durante estas casi seis semanas de 'enclaustramiento', poco se ha sabido de Charlène, pues siempre la rodea un halo de misterio.

Se desconoce si los príncipes Jacques y Gabriella han acompañado a sus padres en este viaje. Desde que nacieron en diciembre de 2014, la princesa Charlène ha explicado que ha intentando separarse lo menos posible de sus mellizos. Ese fue uno de los motivos por los que no viajó a los Juegos Olímpicos de Río. Conociendo esta información, no sería tan descabellado pensar que los pequeños también están ahora en Nueva York. Sea como fuere, cuando es seguro que veremos a Jacques y Gabriella será el próximo 19 de noviembre, durante la celebración de la Fiesta Nacional de Mónaco.

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Una casa con mucho significado

Esta misma semana, se ha conocido que el príncipe Alberto ha adquirido la casa en la que Grace Kellyvivió durante su infancia en Filadelfia y en la que recibió la proposición de matrimonio del príncipe Rainiero. "Todavía no sabemosqué haremos con ella.Quizás la convirtamos en un museo dedicado a mi madre o en oficinas para la Fundación Princesa Grace", ha explicado el soberano del principado a la revista estadounidense 'People'.

"La casa es muy bonita y muy especial para mi familia. Recuerdo una visita que hice en la que mi abuela me preparó una de las habitaciones del primer piso. Tendría unos 5 años y fue una de las primeras veces en las que no compartía habitación con mis hermanas. Recuerdo estar sentado en la ventana, mirando cómo pasaban los coches y disfrutando de la soledad", ha narrado Alberto,quien ha compartido más recuerdos que vivió en la casa de su madre: "La primera vez que vine no tendría más de 2 años, recuerdo que me enrollé con la alfombra del comedor".

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