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Dos turistas llamados Alberto y Charlène: las vacaciones en Irlanda de los príncipes
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Dos turistas llamados Alberto y Charlène: las vacaciones en Irlanda de los príncipes

El soberano y su esposa hicieron turismo en Drogheda y estuvieron comiendo en un modesto restaurante de la zona

Foto: Alberto y Charlène en un fotomontaje de Vanitatis
Alberto y Charlène en un fotomontaje de Vanitatis

Alberto y Charlène de Mónaco han abandonado por unos días su principado y han puesto rumbo a Irlanda. El soberano y su esposa fueron vistos en Drogheda, una localidad industrial y portuaria situada en el condado de Louth, al norte de la isla. Junto a unos amigos, Alberto y Charlène disfrutaron de una mañana de turismo por la zona y a la hora de comer se dirigieron a Monasterboice Inn, un restaurante de bajo perfil en el que degustaron platos tradicionales. Roseanna Donegan, la encargada del local, ha hablado con los medios de comunicación y ha asegurado que fue una verdadera sorpresa recibir a los príncipes.

"No teníamos ni idea de que iban a venir. Nos llamaron un poco antes para reservar una mesa para 12 personas así como una de 6 para su séquito. Preparamos las mesas como haríamos para cualquier cliente y no estábamos nada nerviosos porque realmente no sabíamos a quién o qué esperar", ha explicado Donegan. Asimismo, varios camareros del restaurante han asegurado que se asombraron de lo amables que eran Alberto y Charlène. "Son una familia encantadora con los pies en el suelo. Fue como servir a cualquier otra familia del restaurante. El príncipe Alberto quiso sentarse en la zona del bar pero, desafortunadamente, no teníamos sitios libres, así que lo hicieron en el comedor. Él pidió una sopa de marisco y una pinta de Hop House 13. Fueron unos huéspedes maravillosos".

Para la princesa también tienen muy buenas palabras. Dicen de ella que es "una mujer verdaderamente atractiva. Ella fue encantadora. Todos lo fueron. El príncipe Alberto conocía muchos detalles sobre las ruinas de Monasterboice. Les dimos un regalo cuando se fueron, dos libros de historia local del profesor Haberson. Parecían encantados con ellos".

placeholder Las ruinas de Monasterboice
Las ruinas de Monasterboice

Un primer viaje a Irlanda muy accidentado

Esta no es la primera ocasión en la que el príncipe Alberto visita Irlanda, un país con el que tiene una estrecha relación, pues varios ancestros de su madre eran irlandeses. Cuando tenía apenas 3 años, en 1961, Alberto viajó a la tierra de St. Patrick junto a sus padres, el príncipe Rainiero y la princesa Grace, y su hermana mayor, la princesa Carolina. Dada la gran expectación que levantaba la pareja, fueron casi 5.000 los curiosos que se desplazaron hasta las inmediaciones del Gresham Hotel para verles en primera persona durante un banquete de gala celebrado allí. Cuando llegó el coche con los ilustres invitados, la multitud sobrepasó el cordón policial y se produjo una gran avalancha en la que cientos de personas fueron aplastadas y una mujer sufrió un ataque al corazón. A pesar del incidente, la gente seguía gritando: "Queremos ver a Grace, queremos ver a Grace", y ella decidió salir al balcón no sin antes secarse las lágrimas por lo que acababa de suceder.

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Alberto y Charlène de Mónaco han abandonado por unos días su principado y han puesto rumbo a Irlanda. El soberano y su esposa fueron vistos en Drogheda, una localidad industrial y portuaria situada en el condado de Louth, al norte de la isla. Junto a unos amigos, Alberto y Charlène disfrutaron de una mañana de turismo por la zona y a la hora de comer se dirigieron a Monasterboice Inn, un restaurante de bajo perfil en el que degustaron platos tradicionales. Roseanna Donegan, la encargada del local, ha hablado con los medios de comunicación y ha asegurado que fue una verdadera sorpresa recibir a los príncipes.

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