Mary de Dinamarca enseña sus brazos (a años luz de los de Letizia)

Mary de Dinamarca está cautivando en su viaje por Estados Unidos, en el que no ha estado acompañada por su marido, el príncipe Federico. Espléndida en cada uno de los actos programados, ha cautivado particularmente por un vestido 'black and white' que dejaba sus hombros y sus brazos al descubierto.

Un modelo sencillo y ceñido, que evidenciaba su espléndida silueta, después de haber sido madre de cuatro hijos:Christian, de 12 años, Josephine, de 10, y los mellizos Isabella y Vincent, de siete. El traje, cruzado sobre el busto, marcaba su cintura y nos dejaba entrever una silueta estilizada, pero no tan cincelada como la de nuestra reina Letizia, cuyos musculosos brazos han llamado la atención siempre que se ha puesto un traje de estas características.

Los cuidados de las 'royals'

Es más que evidente que todas las 'royals' cuidan mucho su imagen. Siempre se ha comentado lo que está pendiente de su imagen nuestra reina, pero las princesas y reinas de nuestro entorno no le van a la zaga. Máxima de Holanda se llegó a someter a una dieta muy exigente, gracias a la cual mejoró considerablemente, y resulta evidente que Mary no deja un detalle a la improvisación.

Sea como fuere, Mary ha causado impacto en Estados Unidos y la prensa especializada ha caído rendida a sus pies por su desempeño estos días en su país, además de por su elegancia y simpatía.

La princesa llegó a Estados Unidos después de haber pasado unos días de vacaciones esquiando y demostró estar en perfecta forma. Mary de Dinamarca llegó el pasado jueves y desde entonces ha acudido al Museo Nórdico en Seattle, que se acaba de inaugurar, además de intervenir en un acto en la Universidad de Washington sobre el empoderamiento de las mujeres.

La última vez que Mary había visitado el país fue con su marido en 2016 y recalaron en Washington y Boston. Por cierto que ahora todo el mundo está pendiente deñ 50 cumpleaños del príncipe Federico, que tendrá lugar el próximo 23 de mayo. Serán siete días de actos y una cena de gala en el Palacio de Christiansborg, en la que la reina Margarita ejercerá de anfitriona.

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Mucho se ha hablado de las diferencias de la reina danesa con las parejas de su hijo y de la oposición a que se casara con la atractiva australiana. En una entrevista, el pasado mes de diciembre, Mary de Dinamarca admitía a una publicación londinense que para ella no fue fácil mudarse a su país de adopción. "Tuve un sentimiento de soledad durante un pequeño periodo de tiempo cuando me mudé a Dinamarca. Fue un gran cambio en mi vida, una nueva cultura, un nuevo lenguaje, nuevos amigos y una forma de vida diferente".