Lo que la proclamación de Felipe y Letizia nos dejó: los souvenirs
Cuatro años después de aquellos objetos que se pusieron a la venta en varias tiendas, es bastante difícil volver a encontrarlos. Incluso en internet
Los españolitos no estaban acostumbrados a tal grado 'kitsch', pero durante unos días de junio lo tuvieron. Cuando se despertaron una mañana del 2 de junio de 2014 sabiendo que su rey, don Juan Carlos, abdicaba, no imaginaban que una maquinaria se había puesto en marcha para elaborar souvenirs con la imagen de los nuevos soberanos.
Llaveros, chapas, camisetas o imanes eran puestos a la venta a los pocos días, preparándose para festejar al nuevo rey, Felipe VI, y a la nueva reina, doña Letizia. Lo que se había visto mil veces en el Reino Unido hasta rozar lo paródico se reproducía en nuestro país.
Lo curioso del tema es que se llegaron a elaborar una decena de artículos en apenas medio mes, una nimiedad si se compara con los cincuenta para la boda de los príncipes. Más curioso resulta todavía que la zona de Madrid en la que más se vendieron (en una tienda situada frente al Teatro Real y en otra de la calle Montera) apenas queden ya objetos de este tipo. Fueron, como quien dice, flor de un día.
Entre las reliquias que se pusieron a la venta para celebrar que Felipe y Letizia se convertían en Reyes se encuentran camisetas blancas, azules y rosas a un precio de 12,90 euros. También llaveros metálicos por valor de 3 euros o con adornos de piel (3,90), pastilleros (3,60 euros), dedales, imanes (2,95) y objetos muy clásicos de cerámica como platos -cuyos precios oscilan entre los 4,95 y los 11,95 euros- y tazas, a 5,95 euros.
También resulta sorprendente que don Juan Carlos y doña Sofía tuviesen su propia línea de objetos como despedida de su reinado con un mensaje inscrito: ‘Sus Majestades los Reyes de España. 1975-2014. 39 años de Reinado’ y ‘Sus Majestades los Reyes de España. 19 de junio de 2014’. Eso sí, en comparación, estos objetos fueron muchos menos.
Cuatro años después, aquella parafernalia de objetos ha desaparecido prácticamente y apenas queda rastro de los mismos. Un paseo por páginas de reliquias como TodoColección arroja elementos como dedales hechos de forma 'amateur' o servilletas. Ninguno de estos dos souvenirs se puso a la venta en las tiendas al uso, aunque también se pudieron ver en la plaza de Oriente, escenario del saludo real en el que incluso se colocó un control de seguridad improvisado aquel 19 de junio.
Gran parte de los madrileños vencieron ese día todo tipo de dificultades logísticas para saludar a sus nuevos Reyes. Igualmente complicado les será recuperar aquella parafernalia 'kitsch' con nombre propio que, a juzgar por su 'exclusividad', promete convertirse en material de culto en el futuro.
Los españolitos no estaban acostumbrados a tal grado 'kitsch', pero durante unos días de junio lo tuvieron. Cuando se despertaron una mañana del 2 de junio de 2014 sabiendo que su rey, don Juan Carlos, abdicaba, no imaginaban que una maquinaria se había puesto en marcha para elaborar souvenirs con la imagen de los nuevos soberanos.