¿Tiene Meghan Markle una estilista a distancia?

Fueron 11 las personas que acompañaron al príncipe Harry y a Meghan Markle en su visita oficial de dos días a Irlanda, pero entre ellas no había ningún estilista. ¿La razón? Todo parece apuntar a que la mejor amiga de Meghan, Jessica Mulroney, se encarga de elegir sus looks desde Toronto mediante llamadas telefónicas y visitas exprés cuando hay agendado un viaje o un evento importante.

La periodista Katie Nicholl, autora de la biografía no autorizada del príncipe Harry 'Harry: Life, Loss and Love', declaró a la revista 'Cosmopolitan' que Jessica se encargó de ayudar a Meghan a elegir su vestido de novia. La canadiense estuvo presente durante cada fitting y apoyó a su amiga vía telefónica para resolverle cualquier duda, una labor que, desde entonces, sigue en curso.

Mulroney es una disputada consultora de novias que trabaja para la élite política canadiense. Ella ha sido la encargada de dar un giro al vestidor de la mujer de Justin Trudeau, Sophie Grégoire Trudeau. Jessica conoció a Meghan cuando la exactriz se instaló en Toronto para grabar la serie 'Suits'. La pasión de ambas por el yoga y el pilates fue el detonante de su amistad.

Pero ¿cuáles son las causas para que se crea que la canadiense está ejerciendo de estilista? Para comenzar, el hecho de que Meghan visitara el Southbank Centre de Londres para inaugurar la exposición del centenario del nacimiento de Nelson Mandela enfundada en un trench de la firma canadiense House of Nonie. De primeras, este dato no suena revelador, ¿verdad? Pues...

“Jessica conoce mis diseños desde hace años y es una gran defensora de las firmas canadienses, por lo que estoy segura de que es ella la que introdujo a Meghan en la marca”, explica Nina Kharey, directora creativa de House of Nonie. Por si fuera poco, el perfil de Instagram de la firma sube una imagen de Meghan luciendo su trench acompañado no solo de un texto que señala que es un gran día para la firma, sino que se le agradece públicamente a alguien el haber elegido la marca. ¿Adivinas a quién? Has acertado: Jessica Mulroney.

Un corresponsal de la casa real asegura que Jessica viajó a Londres antes de la comentada visita a Dublín para ayudar a Meghan a dar forma a su maleta. Ella fue la encargada de orquestar cada uno de sus looks, por lo que también se encargó de elegir el comentadísimo vestido de Roland Mouret, que combinó con pendientes de Birks, la firma de una de las amigas íntimas de Jessica Mulroney, Eva Hartling.

Según el corresponsal Omid Scobie, Jessica ha tenido un papel importante a la hora de elegir el vestido de Brandon Maxwell que lució en la Marlborough House, así como los diseños de Christian Dior y Ralph Lauren lucidos en los último días.

¿Una última pista? Meghan Markle ha llevado en alguna ocasión diseños de Smythe, otra firma canadiense que es habitual en el armario de -¡bingo!- Jessica. Todo parece señalar que tras la poca calurosa acogida que tuvieron los looks de Meghan tras contraer matrimonio, la exactriz decidió llamar a su mejor amiga para que le diera a su armario un giro de moda y de color.