Victoria de Suecia habla de la crisis de los 40: así es como la ha esquivado

A estas alturas, nadie puede reprocharle a Victoria de Suecia que se haya privado de hacer algo que le apetecía. Tras casarse (hace ahora ocho años) con Daniel Westling, su profesor de yoga, y posicionarse como una de las herederas europeas más cercanas a su pueblo, los límites personales parecen no existir para la nórdica. Y como era de esperar, la edad no iba a ser un impedimento para que se sienta más realizada que nunca.

El pasado 14 de julio cumplió 41 años en medio de una celebración patria, que incluyó conciertos, actos oficiales y un evento en su honor, donde la princesa lució un llamativo vestido regional. La anécdota del día venía de la mano de su hija, la pequeña Estelle, quien parecía aburrirse sobremanera en dicho festejo, y es que no hay nada más natural que la espontaneidad de un niño. Ahora, el medio escandinavo ‘Expressen’ recoge unas declaraciones que habría concedido la consorte sueca donde reconoce que “no ha sufrido la crisis de la mediana edad”. Es decir, el escalón de los 40.

¿Cuál ha sido su secreto? Pues bien, la receta de la madurez cabal y soberbia parece ser una y sencilla: hacer en todo momento lo que te apetezca y sentirte cómodo y feliz en tu entorno. Ejemplo perfecto es su trayectoria: tras un escandaloso romance con Daniel, que la llevaría a protagonizar tabloides y titulares a lo largo y ancho de toda Europa, finalmente se decidía a crear una familia con el hombre que ella eligió, aunque esto le costase años de trabajo, para ganarse la credibilidad entre los medios nacionales. Además, es ahora a los 40 cuando la royal sueca parece explorar con pleno júbilo uno de sus trabajos más comprometidos: concienciar al pueblo del cuidado de mares y océanos, causa que abandera de un tiempo a esta parte.

Así, Victoria parece convertirse en el mejor ejemplo de empoderamiento contemporáneo que sirve de referencia para otras tantas mujeres que creen cómo su vida se ve estancada a esta edad. Nada más lejos de lo que realmente podría ser. Y si a todo esto se suma el nacimiento de sus dos retoños, Estelle y Óscar, de seis y dos años, que la han convertido en una madre entregada y atenta públicamente, parece que el compendio es de felicidad absoluta. Y a cualquier edad.

[Lea aquí: El precio del romántico vestido de Victoria de Suecia (con guiño a Kate Middleton)]

Era hace unas semanas, en Solliden, la residencia de verano de la familia real sueca, situada en la isla de Öland en el Mar Báltico, donde la hija de Carlos Gustavo de Suecia disfrutaba del inicio de un verano, que se consolida como uno de los más dichosos y boyantes para la futura reina del país.