El espejismo Leonor en Covadonga
Esta visita a Asturias no significa que la Princesa vaya a tener una agenda mucho más fluida. Todo volverá a la normalidad el 9 de septiembre
Quedan escasas horas para que Leonor afronte uno de sus primeros retos como heredera al trono. Este sábado viajará hasta Asturias, principado del que recibe el título de princesa, por primera vez de forma oficial, que no oficiosa, pues son muchas las ocasiones en las que los Borbón Ortiz se han desplazado hasta tierras asturianas. Pero eso pertenece a su intimidad, a su vida privada, tal y como ha recalcado siempre la casa real. La heredera presidirá junto a sus padres tres actos en Covadonga. ¿Significa este hecho que, a partir de este momento, ejercerá como princesa? Todo hace indicar que no, que estamos ante un acontecimiento meramente puntual, un simple espejismo.
No es difícil imaginar a los Reyes preparando a su hija para este gran día. Explicándole el significado de la fecha elegida, dándole consejos sobre cómo comportarse, cuándo tiene que sonreír, cuándo estar más seria o cuándo saludar. Unas lecciones que también habrá recibido la infanta Sofía, que apoyará a su hermana en tan señalada fecha. Y es que aunque ella no será la protagonista, la pequeña de la casa no se perderá los actos, pues don Felipe y doña Letizia no quieren que haya agravios comparativos entre ellas, al menos en esta edad.
La visita de la Princesa de Asturias a su principado ha llamado la atención a la prensa, tanto nacional como internacional. Y es que no deja de resultar llamativo que con 12 años nunca haya estado allí oficialmente. Quizás mucha de la expectación que está generando la visita recaiga en que los Reyes siempre se han mostrado muy reticentes a la hora de que sus hijas realicen apariciones públicas. Ellos quieren que crezcan como niñas normales y las cámaras no son la mejor ayuda.
Pero el futuro de Leonor, y el de la institución monárquica, es el que manda y ya era hora de que la princesa, a sus 12 años, diera un paso más. Es evidente que este año la casa real se ha puesto las pilas en lo que se refiere a la heredera, muy posiblemente como consecuencia de una cierta presión social, pues no deja de llamar la atención lo diferentes que han sido la vida pública del Rey y de su primogénita.
Ya en enero, y coincidiendo con el 50 cumpleaños de Felipe VI, el monarca le impuso a Leonor la insignia de la orden del Toisón de Oro, un privilegio que le otorgó cuando esta cumplió 10 años. Ahora, nueve meses después, la volveremos a ver en su principado. Teniendo esto en cuenta, eran muchos los que pensaban que este acto en Asturias simboliza el inicio de Leonor en los quehaceres reales, siempre con medida, claro, pues ella tiene que centrarse en sus estudios.
Pero nada más lejos de la realidad. Esta visita al principado es un espejismo, pues después de esta aparición todo volverá a la normalidad. Uno de los actos en los que su presencia está más que justificada son los Premios Princesa de Asturias, pues son los que llevan su título y de cuya fundación ella es presidenta de honor. Sin embargo, Felipe ya confesó durante el posado de verano en la Almudaina que no hay intención alguna de que Leonor vaya a la entrega de los galardones.
Si los Asturias, que tienen un trasfondo más histórico, están descartados, mucho más los Princesa de Girona, y más teniendo en cuenta cómo está la situación catalana, que este año provocó que los galardones se quedaran sin el recinto en el que siempre se entregaban.
Así pues, si seguimos el programa de salidas anuales de Leonor, es de esperar que su siguiente aparición sea el 12 de octubre, en el Día de la Hispanidad. Después viene la misa de Pascua en la catedral de Palma -que el próximo año estará llena de expectación tras lo sucedido entre las dos Reinas esta vez- y ya en verano Mallorca.
Sea como fuere, lo que está claro es que Leonor se va haciendo mayor y cada vez sus compromisos y apariciones van a ser más inevitables. Los españoles quieren ver y conocer a su Princesa.
Quedan escasas horas para que Leonor afronte uno de sus primeros retos como heredera al trono. Este sábado viajará hasta Asturias, principado del que recibe el título de princesa, por primera vez de forma oficial, que no oficiosa, pues son muchas las ocasiones en las que los Borbón Ortiz se han desplazado hasta tierras asturianas. Pero eso pertenece a su intimidad, a su vida privada, tal y como ha recalcado siempre la casa real. La heredera presidirá junto a sus padres tres actos en Covadonga. ¿Significa este hecho que, a partir de este momento, ejercerá como princesa? Todo hace indicar que no, que estamos ante un acontecimiento meramente puntual, un simple espejismo.