Meghan y Kate no se llevan bien: posible causa de la mudanza de los Sussex
La sorprendente decisión de que el príncipe Harry y su mujer se instalen en Windsor, en lugar de en Kensington está dando mucho que hablar en el Reino Unido
El comunicado de Kensington Palace anunciando que a primeros de año Harry y Meghan dejarán de vivir en Kensington para instalarse en Windsor ha sorprendido a todo el mundo. Ahora, la prensa inglesa, muy acostumbrada a desmenuzar hasta el más mínimo detalle de la familia, ha llegado a la conclusión de que la causa, lejos de ser que necesitan más espacio, ante el nacmiento el año que viene de su primer bebé, es que la duquesa de Sussex y su cuñada, la duquesa de Cambridge, tienen ciertas diferencias...
Guillermo y Harry siempre han estado muy unidos. Sobre todo desde la muerte de su madre, Diana de Gales, una tragedia a la que tuvieron que sobreponerse juntos. Sin embargo, sus mujeres podrían haber supuesto un cambio en su relación, según una fuente cercana a los Cambridge que cita 'Daily Mail': "Kate y Meghan son muy diferntes y realmente no se caen bien".
Aparentemente, la mudanza de los Sussex tiene su lógica. En la actualidad su hogar solo tiene dos habitaciones, mientras que Frogmore Cottage, donde se instalarán una vez acaben de acondicionarla y amueblarla, cuenta con diez.
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Asimismo, tendrían espacio para la madre de la exactriz, Doria, que se acaba de instalar en el Reino Unido, y para una nanny. Por otra parte, es una propiedad mucho más modesta que la que utilizan los Cambridge, en Kensington: 22 habitaciones y cinco millones de euros, aproximadamente, en reformas, que han terminado recientemente.
Según parece, los rumores de tensión entre Kate y Meghan vienen de atrás, pero, además, da la impresión también de que se ha acabado la luna de miel de la protagonista de 'Suits' con los medios de comunicación británicos. Además de desvelarse que tres empleados han renunciado a sus puestos, se dice que Meghan es demasiado directa para las costumbres de los Windsor y se habla también de tiras y aflojas con la reina Isabel a propósito de qué tiara iba a lucir en su boda.
El comunicado de Kensington Palace anunciando que a primeros de año Harry y Meghan dejarán de vivir en Kensington para instalarse en Windsor ha sorprendido a todo el mundo. Ahora, la prensa inglesa, muy acostumbrada a desmenuzar hasta el más mínimo detalle de la familia, ha llegado a la conclusión de que la causa, lejos de ser que necesitan más espacio, ante el nacmiento el año que viene de su primer bebé, es que la duquesa de Sussex y su cuñada, la duquesa de Cambridge, tienen ciertas diferencias...