La nostálgica salida nocturna de la reina Máxima en Argentina

Esta semana, Máxima de Holanda ha vuelto a su Argentina natal por primera vez desde que muriese su hermana. Aunque la razón oficial es su participación en la reunión del G20, gran parte de su actividad pública no ha sido revelada ni por la embajada holandesa ni por la ONU.

La reina aterrizó en el país poco antes de esa reunión, el miércoles por la mañana. Según publica el diario 'Clarín', esa misma noche participó en una reunión con viejas compañeras del que fue su instituto, el Northlands. Al parecer, fue un encuentro cargado de nostalgia, ya que se han cumplido tres décadas desde que ingresaron en el centro.

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Más allá de sus ratos de ocio, Máxima participará en los actos paralelos al G20 como defensora especial del secretario general de la ONU para la Financiación Inclusiva para el Desarrollo. Ese es su cometido hasta que abandone el país este mismo sábado. Desde 2011, la reina Máxima también ha sido presidenta honoraria de la Alianza Mundial para la Inclusión Financiera (GPFI) del G-20 y es Global Agenda Trustee para la iniciativa sobre el Futuro del Sistema Financiero Global del Foro Económico Mundial.

El resto del programa oficial de Máxima se ha mantenido oculto, pero no sería de extrañar que estos días también haya aprovechado para visitar la tumba de su hermana. A día de hoy, ni siquiera se conoce dónde pasará la Navidad la familia real holandesa. Uno de los posibles destinos podría ser Buenos Aires, ciudad de residencia de los Zorreguieta. Eso haría que Máxima esté cerca de los suyos en unas fechas especialmente sensibles en los que estará muy presente el recuerdo de Inés Zorreguieta, que fue hallada muerta en su apartamento de Buenos Aires el pasado 7 de junio.

Por ahora, la monarca holandesa ha podido aprovechar un rato junto a sus amigas para revivir viejos tiempos y suavizar la herida que dejó el fallecimiento de su hermana.