Meghan y su 'sorpresa' en el WE Day: ¿acto inocente o boicot intencionado?

Tras la recepción que organizó en Buckingham la reina Isabel para conmemorar los 50 años de Carlos como príncipe de Gales, estaba previsto que no volviéramos a ver a Meghan Markle hasta el 8 de marzo, cuando será una de las participantes en una mesa redonda sobre la importancia del Día Internacional de la Mujer y la brecha que aún hoy existe entre géneros. Pero no. La duquesa de Sussex no podía dejar a sus admiradores tres días enteros sin saber nada de ella. Así que este miércoles ha aparecido por sorpresa en el WE Day, un multitudinario evento solidario organizado por WE, una ONG con la que el príncipe Harry está implicado al máximo. No suele perderse ninguno de los eventos benéficos, sean donde sean, y celebrándose en Londres, Harry no podía faltar.

Harry estaba dando el discurso inaugural sobre el escenario cuando, por sorpresa, ha invitado a su mujer a subir junto a él, aunque en ningún momento estaba prevista su asistencia y mucho menos su participación en ninguna actividad del programa. Mientras subía por la escalera hacia el escenario, el público ha gritado y ha aplaudido enloquecido, un fervor que seguro ha transportado a la exactriz a sus tiempos de estrenos y alfombras rojas. El príncipe Harry ha querido hacer partícipe de su discurso a su esposa, ya convertida en la protagonista del acto: "Estoy con vosotros. Estamos con vosotros. A trabajar".

Pero en este gesto, que podría ser espontáneo e inocente a priori, muchos han visto una mala intención de la duquesa de Sussex y un boicot en toda regla a su cuñada, Kate Middleton. El WE Day en el que Harry y Meghan han participado ha coincidido con la visita de los duques de Cambridge a Blackpool, una localidad costera del noroeste de Inglaterra. Allí Guillermo y Kate tenían previstas actividades tanto conjuntas como por separado. Unas actividades que iban a centrar la atención mediática del día, pero que han quedado algo eclipsadas por la aparición estelar de la duquesa de Sussex en Wembley, donde se celebraba el evento benéfico que presidía Harry.

¿Estamos ante una nueva zancadilla entre las dos cuñadas? Este último gesto de Meghan podría ser la pista definitva sobre su relación, aparentemente cordial ante las cámaras y fotógrafos, pero muy fría y distante en privado, según llevan afirmando los principales diarios británicos desde que toda una estrella de la televisión, mestiza y divorciada como es Meghan Markle rompiera todos los esquemas hasta ahora establecidos en Buckingham.