Los Clooney, de defensores de Meghan Markle a invitados del príncipe Carlos

Si por algo se ha hablado de George y Amal Clooney en los últimos meses, ha sido por la relación tan cercana que tienen con el príncipe Harry y Meghan Markle. No solo estuvieron invitados a su boda, sino que les han demostrado su amistad a la mínima ocasión desde entonces. Además de que el actor se erigió en el más fiel defensor de su amiga hace unas semanas ante los continuos ataques que recibía, la abogada libanesa hizo a Meghan Markle uno de los mejores regalos para su baby shower en Nueva York, el vuelo en avión privado que tanto dio que hablar en la prensa británica.

Y ahora parece que el matrimonio ha extendido esa amistad al príncipe Carlos, con el que compartieron mesa y mantel este martes en el palacio de Buckingham, durante la cena de la organización benéfica Prince's Trust, fundada en 1976 por el propio príncipe de Gales. Además de Amal y George Clooney, también asistieron el actor Benedict Cumberbatch, Luke Evans o Josh Hartnett, embajadores de lujo de esta fundación, centrada en los jóvenes más desfavorecidos. Fue una cena de gala en la que Amal Clooney deslumbró con un vestido asimétrico en blanco nuclear, con el que se convirtió en el centro de atención de todas las fotografías.

Tan impecable era el look de la abogada de derechos humanos que fue una de las pocas invitadas que no se colocó el pin con el logo de la fundación, a diferencia de su marido y el resto de embajadores. Un clutch metalizado y la frondosa melena suelta completaban el impecable estilismo de Amal Clooney, que hizo más que buenas migas con el suegro de su amiga, al que ya conocía de la boda del príncipe Harry y Meghan Markle.

En los momentos previos a la cena, quedó más que patente la buena relación que existe entre el príncipe Carlos y el matrimonio Clooney. Estuvieron hablando durante un buen rato, en el que las sonrisas se convirtieron en las protagonistas de su conversación. De todos es conocido el sentido del humor del hijo mayor de la reina Isabel II, algo que tiene en común con el actor y director, y que ambos dejaron claro ante las cámaras. Unas imágenes que recordaban a las del pasado lunes en la misa del Día de la Commonwealth en la abadía de Westminster, cuando el príncipe Carlos arrancó las carcajadas de su nuera con sus comentarios. Parece que su nexo de unión y el tener a la duquesa de Sussex en común les hacía estar muy cómodos y como si se conocieran de toda la vida. Y es que lo que Meghan ha unido, que no lo separe nadie.