No todos podrán conocer a Baby Sussex: a quiénes ha vetado Meghan (y el motivo)

A Meghan Markle se le pueden atribuir muchos errores, lo que explicaría las dimisiones de las personas que trabajaban para ella, pero si hay algo que ha perjudicado a su imagen pública ha sido su familia paterna. Por eso, no es de extrañar que se haya establecido lo que se conoce como un cordón sanitario en torno a su padre, Thomas Markle, y a su hermana Samantha, quienes han utilizado la prensa sensacionalista británica para airear sus diferencias con una mujer que decidió dejar una prometedora carrera como actriz para emparentar con los Windsor.

Desde que Meghan se comprometió con el príncipe Harry ha sido su padre, Thomas Markle, director de fotografía de cine ya retirado, quien más quebraderos de cabeza le ha dado. Tanto que no la acompañó al altar en su histórica boda en la capilla de San Jorge en Windsor (recordemos que había sufrido un infarto, pero también le habían descubierto un montaje periodístico) y no se han vuelto a ver, aunque, según una carta que él mismo publicó, saltándose todas las líneas rojas de la discreción y la prudencia, la ahora duquesa de Sussex le reprochaba todo lo que había hecho por él y subrayaba que seguía teniendo el mismo teléfono de siempre.

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La incomunicación entre padre e hija, que continúa a día de hoy, ha sido también aireada por Samantha Markle, hermana de padre de la que fuera protagonista de la serie 'Suits' y que amenaza con la publicación de dos libros nada edificantes con los que quiere poner en entredicho a Meghan, quien asegura que apenas han tenido trato.

Las incendiarias declaraciones de Thomas y Samantha, esta segunda culpando a su hermana de no prestar a su padre la atención que requiere, no han hecho sino abrir unas heridas de las que el príncipe Harry hace todo lo posible por mantener alejada a su mujer. Un instinto de protección que algunos medios asocian a la difícil situación mediática que vivió su propia madre, la inolvidable Diana de Gales.

​Un cordón sanitario

Resulta muy poco plausible que Meghan acceda a que Thomas Markle conozca al que ya conocemos como Baby Sussex, habida cuenta de los precedentes y la política que está siguiendo la Casa Real británica, que en estos días se ha visto también obligada a apagar el fuego de los que afirmaban que el príncipe Guillermo habría sido infiel a su mujer, bajo amenazas de demandar a todos los que siguieran alimentando ese rumor.

La hipotética marcha de Harry y Meghan a Sudáfrica después de convertirse en padres les apartaría del foco mediático en cierta manera y les alejaría también de figuras como las de Thomas y Samantha Markle, quienes no pierden la oportunidad de pisar todos los charcos que les ponen delante. El último de ellos afirmar que su hermana siente envidia de su cuñada Kate, ante unas hipotéticas desavenencias entre ambas cuñadas que vienen glosando los tabloides británicos desde hace meses.

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Y, por supuesto, no ha perdido la oportunidad de hablar sobre la maternidad de su hermana, en un especial emitido por la cadena TLC: "¿Cuántas habitaciones hay en Frogmore? Las puedo ver todas llenas de niñeras. Meghan tiene una personalidad muy fuerte y, por supuesto, habrá encontronazos. También puede aprender y crecer gracias a esa experiencia, así que lo importante es si la niñera sabe mantenerla a raya para que no acabe hecha un mar de lágrimas".

Según medios estadounidenses, Thomas Markle no viajará al Reino Unido a conocer a su nieto, algo que sí ha hecho su exmujer, Doria Ragland, quien no se va a perder este acontecimiento tan trascendental en la vida de su hija.