Con tiara y de largo: este es el próximo evento royal de Letizia en el Lejano Oriente

Quedan todavía cerca de cinco meses, pero los Reyes ya lo tienen decidido. Saben que no pueden faltar a este acontecimiento que reunirá a toda la realeza mundial; es más, ya se ha anunciado que la lista de asistentes asciende a 2.600 personalidades procedentes de 195 naciones, y entre ellos no faltan don Felipe y doña Letizia, quienes guardan una buenísima relación con el que será el gran protagonista de las diferentes actividades que se llevarán a cabo y que contarán con una combinación de tradición y boato inolvidable.

Tal como ha podido confirmar Vanitatis en primicia, don Felipe y doña Letizia viajarán a mediados de octubre a Japón para estar presentes en las ceremonias de entronización -o Sokuirei-Seiden-no-Gi- del emperador Naruhito. Tras la abdicación de Akihito el pasado 30 de abril, su primogénito fue coronado el día 1 de mayo y lo hizo con una breve y sencilla ceremonia de tan solo diez minutos. Será el 22 de octubre cuando Japón tire la casa por la ventana para que Naruhito anuncie oficialmente que ha heredado la corona y que es el 126º emperador de la dinastía más antigua del mundo.

Durante ese día se llevarán a cabo numerosas actividades. La gran ceremonia tendrá como escenario el Salón de Estado del Palacio Imperial, donde se colocará el trono Takamikura, de ocho toneladas y 6,5 metros de altura. Normalmente, este ornamento se encuentra en Kioto y solo se desplaza a Tokio para las entronizaciones. En el interior se colocan la Espada Sagrada y la Joya Sagrada. Justo al lado del Takamikura se ubicará el trono Michodai, de iguales características pero más pequeño, destinado para las emperatrices, en este caso Masako.

Si nos fijamos en la entronización anterior, la de Akihito y Michiko en 1990, veremos que para la ocasión los emperadores vistieron vistosos trajes de varios kilos de peso y grandes tocados. Los invitados royals que asistieron a esta primera ceremonia, entre los que se encontraban el príncipe Carlos y Lady Di o el entonces príncipe Felipe, tenían un dress code marcado: traje corto para ellas con tocado y para ellos chaqué y condecoraciones. Es previsible que Letizia tenga que seguir la misma etiqueta cuando asista el próximo octubre.

Tras la ceremonia, los emperadores harán un recorrido en coche por la ciudad de Tokio para saludar a sus ciudadanos. Naruhito llevará frac y Masako, vestido blanco de gala y tiara. Esa noche se celebrarán varios banquetes en el Palacio Imperial, aunque se desconoce si a algunos de ellos asistirán los miembros de la realeza ya que al día siguiente hay otro banquete preparado exclusivamente para jefes de Estado extranjeros, royals, jefes de Gobierno, representantes y funcionarios gubernamentales en el hotel New Otani de Tokio.

De nuevo retrocediendo hasta 1990 a la entronización de Akihito, vemos que las damas lucieron en el banquete sus mejores galas: tiara, traje largo y condecoraciones. En la imagen inferior vemos a la reina Margarita de rojo junto a su marido, el ya fallecido príncipe Henrik, y en el lado izquierdo a la gran duquesa Josefina Carlota de Luxemburgo, madre del actual duque, conversando con la emperatriz Michiko

La última vez que don Felipe y doña Letizia estuvieron en Japón fue en abril de 2017, cuando realizaron una visita de Estado al país nipón. Los Reyes fueron recibidos por Akihito y Michiko, quienes a pesar de su avanzada edad, ejercieron como perfectos anfitriones. Durante el banquete, el emperador habló de "nostalgia" y "cariño" al enumerar sus viajes a nuestro país tanto como príncipe heredero como emperador y aseguró que recuerda "con emoción" que "en cada ocasión en la que lo visitaba podía contemplar los impresionantes cambios que se habían producido en el país".