Lady Di, los animales y un broche: las 3 polémicas de la princesa Michael de Kent

Además de la novia, este sábado habrá otra gran protagonista en la boda de Lady Gabriella Windsor con Thomas Kingston. Y no será otra que la madre de la novia, la princesa Michael de Kent, o lo que es lo mismo, María Cristina von Reibnitz, esposa del príncipe Michael de Kent, primo hermano de la reina Isabel II. Alemana de nacimiento, nunca ha podido escapar de la polémica, no solo por todo lo que ha rodeado a su familia -su padre sirvió en las SS nazis-, sino también por su matrimonio, ya que llegó a la familia real británica tras haber pasado una vez por el altar. Consiguió anular su primer matrimonio, pero su religión católica obligó a su marido a renunciar a sus derechos sucesorios, tal y como estipula la estricta ley de 1701.

Pero ha sido en los últimos años cuando María Cristina de Kent más ha dado que hablar. La sombra del racismo la ha perseguido durante toda su vida, con algunos deslices muy conocidos. En 2004, sugirió a un grupo de afroamericanos que cenaban en un restaurante de Nueva York que volvieran a las colonias. Y según confesó su exyerno, Aatish Taseer, bautizó a dos ovejas negras que tenía en Kensington con los nombres de Venus y Serena, en alusión a las hermanas Williams.

Pero fue en diciembre de 2017 cuando tuvo que salir al paso de estas acusaciones por una desafortunada elección en su vestuario. En la comida de Navidad en Buckingham -la primera para Meghan Markle- lució en la solapa un broche Blackamoor, un tipo de joyería originaria del siglo XVI, muy controvertida por fomentar el racismo. Las explicaciones de que era un regalo y había sido usado varias veces en el pasado, facilitadas por el portavoz de la familia, no le sirvieron y tuvo que prometer no volver a usarlo.

En 2015, la princesa Michael de Kent también se convirtió en el centro de todas las críticas por unas desafortunadas declaraciones sobre los animales. "Soy una gran amante de los animales pero últimamente todo el mundo habla de sus derechos. Yo creo que los animales no tienen derechos. Ellos no tienen cuentas bancarias, no pagan impuestos y no votan, así que no tienen derechos. Tenemos una obligación con los animales, pero eso no significa que tengan ningún derecho. Las personas solo tienen derechos si pagan sus impuestos, así se ganan los derechos". Medios de comunicación y redes sociales se le echaron encima tras estas polémicas palabras. Además de recibir toda clase de insultos, muchos no tardaron en cuestionar si ella tampoco tenía derechos, ya que, como miembro de la familia real, no está oligada a pasar impuestos.

Y un año antes, su boca también parecía actuar mucho antes que su cerebro y dejaba escapar unas palabras sobre Diana de Gales que no dejaron indiferente a nadie. María Cristina de Kent promocionaba uno de sus libros en Estados Unidos, por lo que ofreció una entrevista en la que apenas dejó títere con cabeza, y eso que avisó al presentador al comienzo de la misma de que no podía hablar mal de la familia de su marido. Pero quizá la princesa Diana no se encontraba ya en esta categoría, por lo que fue la protagonista de una de sus perlas: "Diana era una ignorante que no sabía hacer frente a la fama porque no tuvo una madre estricta". Tras dos años sin protagonizar ninguno de estos momentos embarazosos, solo queda esperar al sábado y ver qué nos depara esta vez la polémica madre de la novia.