Doña Sofía hace diez años: "A un rey solo debe jubilarle la muerte"

Es extraño que los miembros de la monarquía española concedan entrevistas o hablen públicamente sobre temas que no tengan que ver con su labor institucional. Sin embargo, en 2008 la reina Sofía se atrevió a dar su opinión -polémica cuando menos- sobre distintos temas, desde el aborto hasta la eutanasia pasando por el matrimonio gay, en conversaciones con Pilar Urbano, que después la periodista plasmó en su libro 'La reina muy de cerca'. Pues bien, en esa obra encontramos ahora unas palabras que cobran especial significado.

Este mismo lunes, la Casa Real daba a conocer que el rey Juan Carlos ha decidido dejar la vida pública y jubilarse por completo. Es decir, ya no tendrá actos en su agenda ni representará más a la Corona a partir del próximo 2 de junio, coincidiendo con el quinto aniversario en el que anunció su abdicación. Así se lo hacía saber a su hijo, Felipe VI, a través de una carta llena de solemnidad y también de cariño que concluía: "Tomo esta decisión desde el gran cariño y orgullo de padre que por ti siento, con mi lealtad siempre. Un grandísimo abrazo de tu padre".

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Pero... ¿qué pasa con la reina Sofía? La Reina continuará con su agenda, tal como ha confirmado la Casa Real, aunque hay que destacar que a la Sofía del 2008, la del libro de Pilar Urbano, esta decisión no le habría parecido bien, ni esta ni la de abdicar. La madre de Felipe VI se mostró tajante sobre si un rey puede o no dejar el trono. Y es que hay que tener en cuenta que ella es una royal de la vieja escuela, de la misma que Isabel II, y que es la única mujer nieta, hija, hermana, esposa y madre de reyes, así que para ella un monarca debe morir llevando la corona puesta.

"¿Abdicar? ¡Nunca! El rey no abdicará jamás. Ni lo hablamos nunca. Se da por sobrentendido que reinará hasta la muerte. A un rey solo debe jubilarle la muerte. Salvo que... Lo deseable, lo conveniente por el asentamiento de la propia institución en los tiempos nuevos de España es que el Rey muera en su cama y alguien diga: el Rey ha muerto, ¡viva el rey! Yo eso lo viví en mi casa, en Atenas. Cuando murió mi padre, inmediatamente el primer ministro aclamó a mi hermano Constantino como nuevo rey", aseguraba la emérita a Urbano.

Si la decisión de abdicar no le parecía bien, tampoco la de jubilarse, tal como recalca al decir que "a un rey solo debe jubilarle la muerte". A pesar de sus palabras hace ya más de una década, parece que las cosas cambian y, a juzgar por sus últimas apariciones, los Reyes eméritos están mejor que nunca y es muy posible que don Juan Carlos haya contado con el total apoyo de su esposa, ahora que están viviendo una 'segunda luna de miel'. Ya se sabe que a la vejez viruelas... Como les sucede a Alberto y Paola de Bélgica, que de ser un matrimonio a punto de separarse en distintas ocasiones han pasado a ser uña y carne.

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Aunque su marido ha decidido caerse de la agenda, la reina Sofía, quien está perfecta de salud y sigue llevando a cabo actos para sus asociaciones, como el Proyecto Alzhéimer promovido por la Fundación Reina Sofía, seguirá representando a la Corona. Así pues, a partir del 2 de junio el rey Felipe contará solo con dos 'ayudantes', quedándose con Sofía y Letizia, suegra y nuera, quienes formarán el núcleo duro de la Casa Real hasta que Leonor y Sofía cumplan la mayoría de edad y estén preparadas para asumir papeles representativos.

Hay que destacar que desde la proclamación de Felipe VI, el 19 de junio de 2014, la presencia pública de don Juan Carlos y doña Sofía descendió considerablemente y que aunque ambos han seguido cumpliendo con compromisos, sobre todo funerales, su presencia ha sido más bien anecdótica. Por ejemplo, en lo que llevamos de año el emérito ha cumplido con siete actos intitucionales, así que la mayoría de veces que lo hemos visto ha sido en los toros. Por su parte, Sofía acumula 10 actos en este 2019, aunque dos de ellos fuera de nuestras fronteras, lo que demuestra que sigue 'a tope'.

El club de los jubilados

Con esta decisión, el rey Juan Carlos se suma al club de los jubilados de oro de la monarquía europea, en el que ahora tan solo se encontraba el duque de Edimburgo. Fue en junio de 2017 cuando Buckingham Palace anunció que el marido de Isabel II había decidido retirarse de la vida pública. Actualmente, a sus 97 años, disfruta de una tranquila vida entre Windsor y Londres, acompañando a su mujer en algún que otro acto, de forma esporádica. También el difunto Enrique de Dinamarca, marido de la reina Margarita, decidió jubilarse a principios de 2016 para poder vivir unos años tranquilo alejado de las cámaras.