La fiesta de Victoria Federica: una reina, un Urdangarin y un incómodo encuentro

Eran las ocho de la tarde cuando los primeros invitados a la fiesta de la puesta de largo de Victoria Federica de Marichalar hacían su entrada en la finca El Chaparral, situada en el barrio de El Plantío, de Majadahonda. Un exclusivo recinto con cuidados y espectaculares jardines que la familia Mondéjar, su propietaria, ha cedido a la hija menor de la infanta Elena para la esperada cita, que tiene lugar nueve meses después de que la joven cumpliera su mayoría de edad, el pasado 9 de septiembre. Y tras una falsa alarma que apuntaba que la fiesta sería en el Teatro Barceló a principios de noviembre, por fin llegaba el día, señalado en rojo en el calendario de una gran parte de la familia Borbón.

ASÍ BAILÓ VICTORIA FEDERICA EN SU FIESTA

Los invitados, la mayoría compañeros de estudios anónimos, hacían su entrada en coche, algo abrumados por la presencia de medios, que esperaban captar alguna foto de la familia más cercana de la protagonista de la noche. Y esa imagen llegaba a las 20:30 de la tarde, cuando aparecía Juan Urdangarin de Borbón, el hijo mayor de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin. El joven ya estuvo junto a su prima el día de su 18 cumpleaños, el pasado septiembre, y tampoco ha querido perderse la noche especial de Victoria, siendo el único miembro de la familia Urdangarin Borbón que asistió, a pesar de la buena relación que tiene la homenajeada con Irene, la hija pequeña de la pareja.

Aunque, eso sí, ha tenido que compartir atención mediática con Gonzalo Caballero, el amigo 'especial' de la nieta del rey Juan Carlos, que llegaba unos minutos después de Juan, muy elegante con esmoquin de la firma Bon Vivant, tal y como publicaba minutos antes en sus redes sociales.

El goteo de invitados siguió dándose a las puertas de la finca El Chaparral. Coches particulares, taxis, vehículos alquilados con conductor y hasta seis minibuses trasladaron a la gran cantidad de invitados que asistieron a la puesta de largo de Victoria Federica. Uno de ellos fue Álvaro de Marichalar, que llegaba en la parte trasera de un taxi, con chaqueta blanca y corbata, saltándose la etiqueta que normalmente se requiere en este tipo de eventos. Tampoco faltó su hermano Ignacio, acompañado de su esposa.

Y las 'grandes estrellas' de la noche hacían acto de presencia minutos después, confirmando el incómodo encuentro que se esperaba en el interior. Casi a la vez llegaban Jaime de Marichalar, el padre de la protagonista, que lo hacía conduciendo su propio vehículo, y la infanta Elena, radiante con un recogido y vestida de blanco.

Con los medios a punto de irse y la esperanza perdida por no haber visto a la protagonista de la noche -quien era probable que estuviera ya en la finca antes de que llegaran los invitados-, hicieron su aparición Felipe de Marichalar, más comúnmente conocido como Froilán, y Mar Torres-Font, de quienes se acaba de confirmar su reconciliación, que se reafirma aún más con su asistencia a la puesta de largo de Victoria Federica. La reina Sofía no quiso perderse la cita, a pesar de que pocos apostaban por su asistencia, dado que es poco tendente a la vida nocturna. Como era de esperar, no asistieron los Reyes ni sus hijas, tampoco el rey Juan Carlos, a pesar de que su nieta mayor es su 'ojito derecho'.