Mohamed VI y su llamativa ausencia en la inauguración de la mayor obra de su reinado
Ordenó a su hijo, Moulay Hassan, que presidiera la ceremonia, desatando así las especulaciones sobre los motivos de su ausencia.
La ampliación del puerto de Tánger Med, frente a Algeciras, es la mayor obra de infraestructuras acometida durante los veinte años de reinado de Mohamed VI en Marruecos. Supone una inversión global, entre aportaciones públicas y privadas, de 2.380 millones de euros, 280 más que lo que se calcula costó finalmente el tren de alta velocidad entre Tánger y Casablanca inaugurado hace cerca de ocho meses.
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Tánger Med II, como se ha bautizado a este desarrollo portuario, es la última y mayor iniciativa de ese gran impulso que el monarca alauí ha querido dar al noroeste de Marruecos que su padre, Hassan II, marginó durante sus 38 años de reinado. Lo consideraba una zona inamistosa para la monarquía. Nada más lógico, por tanto, que fuera el propio soberano el que inaugurara, el jueves, esa gigantesca obra que, cuando alcance su pleno rendimiento, convertirá al conjunto de Tánger Med no solo en el primer puerto de África sino también del Mediterráneo.
Así había sido anunciado a la prensa, que fue convocada el jueves a las 15:00 h. para asistir, una hora más tarde, a la solemne inauguración por Mohamed VI, de 55 años, de Tánger Med II. Poco antes de que empezase la ceremonia los periodistas e invitados fueron, sin embargo, informados por las autoridades de que quedaba aplazada 24 horas a causa de un “problema técnico” que nunca aclararon del todo.
Hay “un barco procedente de Francia que debía llegar para ser el primero en entrar en el puerto”, pero, “por razones meteorológicas no puede estar aquí a tiempo”. Esa fue una de las explicaciones absurdas que los responsables locales proporcionaron a la prensa. El semanario francófono de Casablanca “Tel Quel” las recoge en su web y se mofa de ellas recordando, por ejemplo, que el parte meteorológico señalaba que esa zona del Mediterráneo occidental estaba en absoluta calma.
Incomodada por el aplazamiento, la muy oficial Agencia Especial Tánger Mediterráneo llegó incluso a negar que estuviera prevista ceremonia alguna.
La inauguración tuvo finalmente lugar el viernes por la tarde, pero, en contra de lo previsto, no fue el rey quien la presidió sino que en el último momento delegó en su hijo, el príncipe Moulay Hassan, de 16 años. Tampoco los organizadores del evento ni el palacio real han explicado este cambio en el último momento.
La ausencia real ha desatado de nuevo las especulaciones. Ni que decir tiene que la mayoría de ellas apuntan a problemas de salud sin aportar el menor dato. En febrero de 2018 Mohamed VI fue operado con éxito, en la clínica Ambroise Paré de París, de una arritmia cardiaca. Desde entonces se somete a controles periódicos –el último este mes de junio- y que se sepa no ha sufrido ningún percance. El miércoles 26 aparentaba estar en buena forma cuando presidió en Kenitra la inauguración de la primera fábrica de automóviles en África de la multinacional francesa PSA, un evento de menor alcance que el de Tánger Med II.
Mohamed VI tiene una cierta tradición de dar plantones a, por ejemplo, los huéspedes extranjeros que se disponían a visitarle en Rabat o que ya estaban en la capital. Entre sus damnificados figuran desde los reyes de España, cuya visita de Estado canceló “por motivos de agenda” a principios de enero de 2018, hasta el primer ministro ruso, Dimitri Medvedev, en octubre de 2017, pasando por el turco Recep Tayip Erdogan, en junio de 2013, cuando era jefe de gobierno. Estos últimos pasaron por la capital marroquí sin poder verle.
Hasta ahora, sin embargo, el monarca nunca había fallado en la inauguración de los grandes proyectos que impulsó y, a veces, de otros mucho menores como, por ejemplo, la piscina municipal de Lalla Aicha, en Oujda, en julio de 2008. Bien es verdad que lleva el nombre de una tía suya, fallecida en 2011, a la que tenía mucho afecto. Nunca en Europa un jefe de Estado inauguraría un complejo municipal.
El adolescente Moulay Hassan, que presidió un acto en Kenitra el mismo día que su padre –la entrega de diplomas a una promoción de militares que terminaba un curso de Estado Mayor- fue llamado el viernes por su padre, para sustituirle, cuando se disponía a iniciar sus vacaciones. El 17 y 18 de junio el príncipe heredero pasó con éxito sus exámenes de primero de bachillerato en el Liceo Dar Essalam de Rabat.
La ampliación del puerto de Tánger Med, frente a Algeciras, es la mayor obra de infraestructuras acometida durante los veinte años de reinado de Mohamed VI en Marruecos. Supone una inversión global, entre aportaciones públicas y privadas, de 2.380 millones de euros, 280 más que lo que se calcula costó finalmente el tren de alta velocidad entre Tánger y Casablanca inaugurado hace cerca de ocho meses.