De la rigidez de Kate a la felicidad de Camilla: el lenguaje no verbal del bautizo de Archie

Era a primera hora de la tarde el sábado 6 de julio cuando los duques de Sussex ofrecieron las imágenes oficiales del bautizo de su primer hijo, Archie Harrison. Se trataba, concretamente, de dos fotografías: una bucólica imagen de los felices papás con su hijo en brazos y un retrato oficial de parte de la familia, en el que se echó en falta a los tres hijos de los duques de Cambridge, pero en el que sí estaban las tías maternas del príncipe Harry, como representación de la fallecida Diana de Gales. Y desde la publicación de la fotografías, absolutamente todo lo que hay en ellas ha sido objeto de análisis por parte de los medios británicos.

El 'Daily Mail' ha recurrido a una de sus colaboradoras habituales cuando hay encuentro entre los duques de Cambridge y los de Sussex, como era el caso. Se trata de Judi James, experta en comunicación no verbal, quien no ha tardado en analizar los gestos con los que el príncipe Guillermo y Kate Middleton aparecen en la fotografía junto al resto de la familia y con el pequeño Archie como protagonista. Gestos que también han sido protagonistas de numerosos tuits y entradas en las redes sociales.

James explicó lo diferentes que son las posturas de los Cambridge con las del resto del grupo, especialmente con las de los abuelos de Archie, al otro extremo de la imagen: "Kate parece 'lista para huir', lo que podría obedecer a que sentía cierta incomodidad o bien a su deseo de no hacer sombra a Harry y Meghan", quienes eran los verdaderos protagonistas de la jornada junto a su hijo. "Con una Camilla muy relajada y alegre en un extremo del posado familiar, Kate se sienta en el otro con un aspecto extrañamente autodisminuido y remilgado, con manos en el regazo y una sonrisa parcial en la cara".

Pero el que se lleva la palma en cuanto al análisis de la postura y los gestos es el príncipe Guillermo, con el que ni la experta en lenguaje corporal ni las redes han tenido piedad: "La postura de Guillermo es más difícil de entender, ya que parece mostrar al príncipe en modo de 'club de baile'. La postura de las manos, la inclinación de la cabeza, la expresión facial y la media sonrisa llevan todos los distintivos de un hombre que no te dejará entrar al lugar hasta que obtengas una identificación. El contraste con el orgulloso príncipe Carlos y Doria Ragland es grande, pero también podría ser interesante ver si estaba sonriendo felizmente en cualquiera de los disparos que Harry rechazó".