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Meghan y Harry 'obligan' a los Cambridge a retrasar sus vacaciones con la reina Isabel
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CITA EN BALMORAL

Meghan y Harry 'obligan' a los Cambridge a retrasar sus vacaciones con la reina Isabel

Parece que unas desafortunadas declaraciones de los duques de Sussex han hecho sentir tan incómodos a Guillermo y Kate que no quieren coincidir con ellos en Balmoral

Foto: Meghan Markle y Kate Middleton, en la final de Wimbledon. (EFE)
Meghan Markle y Kate Middleton, en la final de Wimbledon. (EFE)

No lleva ni una semana en Balmoral y la reina Isabel II ya tiene algún que otro quebradero de cabeza debido a las visitas previstas. Es habitual que los Windsor acompañen a la monarca en algún momento durante su estancia anual en el castillo. Una estancia que durará unas tres semanas y que daba comienzo el pasado martes con las primeras dificultades ya sobre la mesa. Y una de ellas, cómo no, derivada de la relación que tienen sus nietos, Guillermo y Harry, y sus respectivas esposas, que parece que no tienen mucha intención de coincidir.

Robert Jobson, redactor del 'Daily Mail' experto en la Casa Real británica, ha desvelado los motivos de que el príncipe Guillermo y Kate Middleton parezcan estar retrasando su llegada a la propiedad escocesa. Según él, unas recientes declaraciones de los Sussex les han hecho sentirse bastante incómodos, ya que tocan además el tema más 'sagrado': sus hijos. Jobson afirma que el hecho de que el príncipe Harry le confesara a la primatóloga Jane Goodall que querían tener "un máximo de dos hijos en un intento por proteger el medio ambiente" podría haber ofendido a su hermano y su cuñada, ya que ellos son familia numerosa junto a los príncipes George, Charlotte y Louis.

placeholder Los duques de Cambridge, junto a sus hijos en el último 'Trooping the colour'. (Reuters)
Los duques de Cambridge, junto a sus hijos en el último 'Trooping the colour'. (Reuters)


Pero aún hay más. La otra razón por la que los Cambridge les están evitando es a cuenta del famoso número de septiembre de la revista Vogue, en el que Meghan Markle ha sido la editora invitada. Una colaboración muy criticada y de la que, probablemente, aún no está todo escrito. La duquesa de Sussex afirmó que no había querido salir en portada para no parecer "vanidosa", sin tener en cuenta que hace unos años era su cuñada la protagonista de la publicación, al igual que lo fuera unos años antes la propia Diana de Gales. Y esta renovada tensión es lo que podría estar impidiendo ver a los Cambridge disfrutando de unos días en Balmoral, a pesar de que, si quisieran ir, no tendrían ni que cruzarse con Harry y Meghan. No solo por la vastísima extensión de terreno, sino porque cada familia se alojaría en lugares diferentes y suficientemente separados para no tener que hacer vida en común.

placeholder Portada del numero de Vogue editado por la duquesa de Sussex. (Reuters)
Portada del numero de Vogue editado por la duquesa de Sussex. (Reuters)


Pero ésta no es la única situación incómoda que se está dando estos días en Balmoral. Al parecer, tal y como publica el 'Daily Mail', Sarah Ferguson ha tenido que acortar su estancia después de que Felipe de Edimburgo llegara antes de lo previsto. La mala relación de exsuegro y exnuera es muy conocida y, aunque la reina Isabel lleva unos años permitiendo que la exesposa -y nueva mejor amiga- del príncipe Andrés pase unos días en su propiedad escocesa cada verano, parece que eso no tiene vigor cuando está allí el Duque, por lo que 'Fergie' tenía que abandonar el castillo este mismo domingo, coincidiendo con el servicio religioso al que asistieron el propio príncipe Andrés acompañando a su madre, así como el príncipe Carlos y la duquesa de Cornualles.

placeholder La reina Isabel II y el príncipe Andrés, tras el servicio religioso de este domingo. (Cordon Press)
La reina Isabel II y el príncipe Andrés, tras el servicio religioso de este domingo. (Cordon Press)

No lleva ni una semana en Balmoral y la reina Isabel II ya tiene algún que otro quebradero de cabeza debido a las visitas previstas. Es habitual que los Windsor acompañen a la monarca en algún momento durante su estancia anual en el castillo. Una estancia que durará unas tres semanas y que daba comienzo el pasado martes con las primeras dificultades ya sobre la mesa. Y una de ellas, cómo no, derivada de la relación que tienen sus nietos, Guillermo y Harry, y sus respectivas esposas, que parece que no tienen mucha intención de coincidir.

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