Las discretas vacaciones de la infanta Cristina: el misterio de dónde y con quién

Ha sido uno de los veranos más atípicos para la familia real en Mallorca, pero también para la familia del rey Felipe. La intensa actividad gráfica que ha habido durante los ocho días de la estancia de los Reyes y sus hijas en Marivent ha servido para eclipsar las grandes ausencias, la de la infanta Cristina y la infanta Elena. Esta última se daba por segura, especialmente tras la ligeramente recuperada relación -al menos en apariencia- de la menor de las dos hermanas con su familia tras el ingreso en prisión de Iñaki Urdangarin.

Pero no hemos visto en Mallorca ni a una ni a otra, aunque sí a sus hijas. Victoria de Marichalar e Irene Urdangarin se dejaban ver el martes 30 de julio por la noche, cuando salieron al cine con la reina Sofía. Y, aunque no hay constancia gráfica, también Miguel, el hijo pequeño de la infanta Cristina, ha pasado unos días con su abuela. Al día siguiente, los tres se despedían de la reina emérita para empezar la segunda parte de sus vacaciones. Victoria, en Marbella con su padre, Jaime de Marichalar, con quien suele pasar el mes de agosto. Irene y Miguel se iban para reunirse con su madre en un destino que, a día de hoy, es aún un misterio.

En los últimos años, ha habido un patrón que se ha repetido. Tras sus días en Mallorca, los hijos de la infanta Cristina se iban a Bidart, donde la familia Urdangarin tiene una residencia de vacaciones en la que tanto Cristina como sus cuatro hijos son más que bienvenidos. Ni siquiera el ingreso en prisión de Iñaki, en junio del año pasado, impidió que Claire Liebaert les recibiera en la localidad francesa, haciendo así piña para afrontar la nueva vida con el exjugador de balonmano preso. Pero este año ha sido diferente. Y es que, aunque muchos esperaban verlos en Bidart tras haber abandonado Palma, no ha habido ni rastro de ellos en la casa familiar.

Durante muchos días, varios fotógrafos de prensa han establecido su lugar de trabajo en las cercanías del caserío y de la playa que suelen frecuentar con la intención de hacer el tradicional reportaje veraniego de la familia en San Juan de Luz. Pero ni los Urdangarin Borbón ni los Urdangarin Liebaert se han dejado caer por una casa que permanece cerrada a cal y canto, dando una imagen muy diferente a la de los últimos años, cuando la numerosa familia Urdangarin inundaba habitaciones, estancias y parcela. Un hermetismo que hace pensar que Claire Liebaert se ha unido a las vacaciones de la infanta Cristina y sus cuatro hijos. Pero, ¿dónde?

El año pasado la hija pequeña de los reyes eméritos visitó los Grandes Lagos de Estados Unidos con, al menos, Juan, Miguel e Irene, con la incógnita de si Pablo Urdangarin se habría unido más adelante, ya que no se le vio en el avión junto a su familia, tal y como contaba Antonio Rossi en 'El programa del verano'. Su anfitriona fue Cristina, una de las hermanas de Iñaki Urdangarin, demostrando una vez más que la relación de la infanta con sus cuñados es infinitamente más estrecha que la que actualmente tiene con su propio hermano, por el que se ha visto hasta vetada en Zarzuela, Marivent y otras residencias familiares. Pero este verano, aunque es casi seguro que comparte de nuevo las vacaciones con su familia política, su escondite es todo un misterio.