La economía doméstica de Mary de Dinamarca: así ahorra una princesa

Mary de Dinamarca se ha convertido en una abanderada en la defensa del medio ambiente. La princesa sabe que cuenta con una importante voz para influir en los demás y por ello ha concedido una entrevista en la que ha contado detalles hasta ahora desconocidos sobre su vida cotidiana, incluidos algunos tips de cómo ahorra en ropa, agua y electricidad. Aunque en su posición la australiana cuenta con numerosos privilegios, la princesa sigue teniendo los pies en el suelo y es consciente de que el futuro del planeta depende de todos.

"Tenemos que trabajar juntos para crear un futuro sostenible. Creo que es la primera vez que se habla del hecho de que el futuro de la Tierra está en nuestras manos, en las de las generaciones actuales, y somos más conscientes de que el planeta lo tenemos en préstamo hasta que las siguientes generaciones se queden a cargo de él. No hay tiempo que perder. El cambio beneficiará a todos", revela la esposa del príncipe Federico en una entrevista publicada en la revista 'Hola'.

Mary es consciente de que no solo basta con hablar del tema, sino que también hay que actuar, por ejemplo en lo que se refiere a la moda. "Es uno de los sectores que más recursos consume del mundo. La producción textil mundial es responsable del 8% de las emisiones de gases de efecto invernadero", narra la australiana, quien es toda una entendida en la materia y sabe que tiene que dar ejemplo.

La princesa ha sido criticada en numerosas ocasiones por su gran consumo de ropa, y sabe que tiene que cambiarlo. "Entiendo perfectamente que mi entorno espere de mí que viva de acuerdo con lo que defiendo. Reconozco sin reservas que consumo gran cantidad de ropa, lo cual tiene que ver con mi vida, mi función y mi trabajo. Pero puedo mejorar y lo estoy intentando", confiesa Mary, quien ya ha se ha puesto las pilas.

"Yo reciclo la ropa no solo para los actos oficiales, sino también en mi vida privada. Compro prendas vintage. Hago que me arreglen la ropa y la reinvento con muchas variantes. Algunos vestidos han pasado de largos a cortos o de tener manga larga a no tenerla. También combino y coordino, así que utilizo mi ropa de muchas maneras distintas. Guardo las prendas que creo que mis hijas heredarán algún día. Regalo mi ropa a personas que pueden aprovecharla y a organizaciones que procesan prendas recicladas. Lo mismo hago con la de mis hijas", relata la princesa.

La australiana tiene a grandes ayudantes en casa para cumplir con la misión de salvar al planeta. Fue el príncipe Christian, su primogénito, el que le contó que se necesitan miles de litros de agua para fabricar una camiseta. Además, al príncipe Vincent, de 8 años, le gusta recoger desechos cada vez que van a la playa: "Lo hace sin que yo le diga nada, por eso me conmueve y lo encuentro maravilloso; pienso lo fantástico que es que mi hijo sea consciente".

Además de todo ello, Mary cuenta uno de los secretos que tiene para ahorrar en casa: "Uno de mis entretenimientos es sacar los vaqueros de la cesta de la ropa sucia y preguntar a los niños si de verdad hace falta volver a lavarlos tan pronto y luego explicarles por qué se lo pregunto; para ahorrar agua, reducir el vertido de microplástico y hacer que la ropa dure más", explica. Y añade: "En nuestra familia siempre nos recordamos unos a otros que hay que apagar las luces, cerrar los grifos y la puerta de la nevera".