LOS SUSSEX EN SUDÁFRICA
Los contrastes de Meghan en solitario: mono de 111 euros y accesorios de 2.183
La duquesa de Sussex ha apostado, para estos dos nuevos actos de tarde, por un mono negro de una sola pieza y ha dejado a los chicos que descansen
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La aventura sudafricana de Meghan Markle y el príncipe Harry continúa, y ya les adelantamos, por si no lo sabían o se les había olvidado, que aún tenemos duques de Sussex para rato. Aunque, si la agenda no engaña, a partir de ahora será el hermano de Guillermo el que continúe con el planning más activo mientras vemos menos a la duquesa participando en actos públicos.
Esta mañana, la pareja nos regalaba uno de los momentos más esperados de su viaje: después de tres días, por fin se dejaba fotografiar con el pequeño Archie, el gran protagonista (en la sombra) de este tour. Bueno, en la sombra hasta hoy: con el título 'Arch meets Archie', un juego de palabras que viene a decir 'El arzobispo conoce a Archie', le hemos podido ver en su visita al arzobispo Desmond Tutu.
Por la tarde, y ya en solitario, Meghan asistía a dos actos: por un lado, un encuentro con UK-SA Tech Hub, un grupo que apoya a las mujeres involucradas en la industria tecnológica; y por otro, una charla con madres del proyecto Mothers2Mothers, un grupo de apoyo de Ciudad del Cabo que da empleo a madres con VIH. Meghan, que acudió en solitario sin su marido ni su hijo, en un momento dado de la charla, se levantó de la silla y dijo: “No puedo ser la única aquí sentada”. También bromeó con la idea de que el pequeño royal no podría estarse quieto con tantos juguetes alrededor. Así pues, el grupo decidió sentarse en el suelo.
Todo al negro con un punto de brillo
Parece que Meghan está más que bien asesorada. Las expertas en moda siempre dicen que la diferencia entre un buen estilismo y uno malo son los accesorios. Con ellos es con lo que se marca la diferencia y lo ha aplicado en este último look.
Como prenda principal, la duquesa de Sussex ha elegido un mono de la marca Everlane, de 111 euros, con un escote en V en la parte delantera y en la espalda. En la marca lo recomiendan especialmente para viajar por su comodidad y un tejido que casi no se arruga, qué mejor.
La clave de este estilismo está en los complementos: ha elegido para la ocasión unos pendientes de la firma Gas Bijoux de plata bañados en oro de 193 €; un anillo de Jennifer Meyer (230 €), una de las favoritas de las estilistas de las revistas norteamericanas, de oro de 18 quilates con una turquesa engarzada, y un brazalete abierto minimal con pavé de brillantes de 1.200 €, la pieza más cara del look. A sus pies, unos salones de ante negros, concretamente el modelo BB del zapatero de origen español Manolo Blahnik (560 €).
[PLAY: Los Sussex, los reyes de la pista]
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