Las fotos oficiales por los 18 años de Elisabeth de Bélgica: la heredera más precoz

Este viernes, Elisabeth de Bélgica llega a los 18 años, convirtiéndose en la primera princesa de su generación que alcanza la mayoría de edad. Aunque tradicionalmente su vida cambiaría bastante a partir de este día por la asignación económica que le corresponde por asumir sus responsabilidades, las cosas de momento van a quedarse como están. Y es que los reyes Felipe y Matilde de Bélgica han preferido retrasar esa 'paga' y que continúe centrada en sus estudios, sin más deberes reales que terminar su formación académica.

Eso sí, la Casa Real ha querido distribuir nuevas imágenes oficiales de la princesa Elisabeth para celebrar su mayoría de edad, con tres fotografías dentro de palacio tomadas por el fotógrafo Michel Gronemberger. Una, junto al rey Felipe; otra, en una de las estancias del palacio con un libro; y otras dos , bajando una majestuosa escalinata y vestida con traje de fiesta.

La duquesa de Brabante es la mayor de su generación royal, formada por Amalia de Holanda, Ingrid de Noruega, la princesa Leonor, Christian de Dinamarca y, un poco más alejada en edad, Estelle de Suecia. Y Elisabeth es también la más precoz, ya que con solo 10 años afrontó su primer acto oficial, con la inauguración del Hospital Infantil Princesa Elisabeth. Solo dos años después pronunció su primer discurso oficial, que escribió ella misma en los tres idiomas de su país. A los 13 años, ya tuvo su primer compromiso oficial convertida en heredera. Y solo hace unos meses hablaba por primera vez ante las cámaras, durante un viaje de cooperación a Kenia que realizó con la reina Matilde, además de acompañar a sus padres al funeral de Estado del gran duque Jean de Luxemburgo.

De momento, son Amalia y Leonor las que le siguen los pasos más de cerca, aunque con una notable diferencia entre una y otra. La princesa Leonor se ha convertido en el centro de la actualidad en los últimos días por su debut en los actos relacionados con los Premios Princesa de Asturias y sus primeros discursos oficiales, que pronunciaba en la propia ceremonia de entrega de galardones y, al día siguiente, en el nombramiento de Asiegu como Pueblo Ejemplar. Estos tres días en Asturias marcaban sin duda un antes y un después en la vida de la heredera, quien ya da sus primeros pasos de cara a su futuro como reina.

Amalia de Orange, aunque es mayor que Leonor, es menos activa institucionalmente hablando. Por expreso deseo de sus padres, Máxima y Guillermo de Holanda, su agenda pública es todavía muy limitada y lo será hasta que cumpla 18 años, es decir, hasta diciembre de 2021. En estos últimos meses, solo ha habido un pequeño aperitivo que nos da muestra de lo que será su faceta oficial. Durante el Día del Rey, la festividad grande del país de los tulipanes, ofreció sus primeras declaraciones ante las cámaras. Aunque acompañada de sus padres, se la vio muy natural y preparada para ser el centro de atención.

De los (aún) no herederos es la princesa Ingrid, sin duda, la más activa institucionalmente. No solo ha celebrado este año su confirmación -uno de los pasos más importantes para su futuro como reina-, sino que ya han sido varios los actos oficiales en los que ha participado, desde la botadura de un barco con su nombre a la inauguración de un parque de esculturas, además de haber pronunciado algún que otro discurso en diferentes apariciones, con diferente fortuna en según qué momento.

Estelle de Suecia y Christian de Dinamarca parece que, de momento, no tienen que preocuparse por su futuro como reyes, aún muy lejano. Aunque eso no quiere decir que no estén recibiendo formación específica o que las diferentes decisiones que toman sus padres con respecto a su vida no tengan una intencionalidad de cara a su futuro. Sin ir más lejos, este mismo año hemos tenido varios ejemplos de cada uno, con las clases que ha recibido la princesa Estelle de Suecia sobre la historia y patrimonio de los Bernadotte o el curso de 12 semanas que va a realizar Christian junto a sus tres hermanos en un internado de Suiza. Una decisión de Federico y Mary de Dinamarca que aún está trayendo cola -y dudas- en el país.