La princesa Mabel, entre los más ricos de Holanda: ¿de dónde viene su fortuna?

Esta semana, la revista holandesa 'Quote' publicaba la lista de los 500 nombres más ricos del país. Una lista en la que se encuentran Guillermo y Máxima de Holanda, en muy buena posición, y también su cuñada, la princesa Mabel, que se estrenaba el año pasado con una considerable fortuna. Pero esa fortuna ha crecido en un suculento 20%, por lo que la viuda del príncipe Friso ha subido nueve puestos en esta particular clasificación, presumiendo de unos jugosos 290 millones de euros en sus cuentas bancarias.

Pero ¿de dónde procede la fortuna que ha amasado la nuera de la princesa Beatriz teniendo en cuenta que no forma parte de la familia real? Dos son las claves de gran parte de estos 290 millones. Una, el príncipe Friso y la herencia que dejó tras su muerte en 2013. Otra, la venta de unas acciones. Aunque ambas están estrechamente relacionadas. Se lo explicamos. En junio de 2018, la princesa Mabel vendió parte de sus acciones en la empresa Ayden, dedicada a los servicios financieros digitales. Lo hacía justo cuando salía a bolsa, por lo que, por un lado, se embolsó 40 millones de euros de la venta. Por otro, las participaciones que aún mantiene duplicaron entonces su valor.

Cuando se supo el monto de su fortuna, muchos en Holanda se preguntaron por el origen de esas acciones, por lo que varios medios holandeses investigaron cuándo y cómo las había comprado. Y todos los datos apuntaban a una dirección, el príncipe Friso. Según pudieron confirmar entonces algunos portales económicos, Friso se habría embarcado en esta aventura financiera poco después de 2006, año de la fundación de la empresa. El riesgo era en aquel tiempo alto, ya que suponía una fuerte inversión y pocos beneficios a corto plazo. Pero doce años después, se vio el acierto del segundo hijo de la princesa Beatriz en cuestiones empresariales.

Lógicamente, Friso ya tenía gran experiencia en el mundo de los negocios. Entre 1998 y 2003, trabajó como banquero de inversiones en Goldman Sachs, uno de los grupos de banca de valores más importantes del mundo, donde asesoraba a clientes sobre fusiones, adquisiciones y salidas a bolsa, además de llegar a ser vicepresidente. Y no solo eso, también fue cofundador y accionista de la empresa comercial holandesa de atención médica MRI Center y de la aerolínea low cost Wizz Air, que salía a la bolsa de valores de Londres en 2015.

Al buen ojo de Friso hay que sumarle la prudencia que mostró Mabel cuando las acciones pasaron a ser suyas, tras el fallecimiento de su marido. En 2014, aunque tuvo oportunidad, no quiso vender su participación en la empresa, que empezaba a ser más que lucrativa. La valoración de Ayden se sitúaba entonces en 1.200 millones de euros, y el valor de sus acciones en más de 22 millones. Una cantidad que ha crecido considerablemente y por la que, de momento, tanto ella como sus hijas tienen el futuro más que asegurado.

Estos datos pueden sorprender en nuestro país, ya que a la realeza española se le conocen pocos negocios privados -por no decir ninguno-. Pero lo cierto es que en las casas reales europeas gustan mucho las actividades privadas, que hacen que algunas amasen fortunas estratosféricas, como el caso de los Windsor, gracias a sus múltiples inversiones y propiedades. En el caso holandés, además de que no está mal visto que tengan sus negocios, hay que recordar que Friso renunció a sus derechos para casarse con la princesa Mabel, por lo que además tenía total libertad para ejercer cualquier tipo de actividad privada.