La vida profesional de la infanta Cristina da un vuelco

Ha tenido muchos jefes desde que empezara en La Caixa hace ya tres décadas. Y ahora vuelve a cambiar. Con la salida de La Caixa del director general, Jaume Giró, un alto cargo que ha estado a su lado en los momentos más duros de su vida, la infanta Cristina cambia de jefe. Giró, periodista de formación, ocupaba el cargo desde 2009 y ha vivido desde 2011 las crisis personales y profesionales de la hermana de Felipe VI.

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Desde darle una especie de excedencia cuando tuvo que declarar como imputada en el juicio por corrupción que acabó con su marido, Iñaki Urdangarin, en prisión hasta apoyarla en el traslado a Ginebra de sus labores de directora del área internacional de la Obra Social.

La Infanta ha tenido varios jefes y, por encima de todos, Isidre Fainé, el presidente de la Fundación Bancaria La Caixa, que ha sido siempre su gran valedor, “un segundo padre”, como lo describía Urdangarin en sus emails. Y ahora toca adaptarse de nuevo. Giró y Cristina de Borbón han mantenido siempre una relación cordial, como suele suceder en el entorno laboral de la Infanta. Solían verse a menudo en Barcelona, a donde la ella viaja con frecuencia para reunirse con su equipo. Su presencia en la sede de la entidad bancaria es siempre bienvenida por sus compañeros.

"Educada y simpática"

“Es amable, educada y simpática -nos comentan quienes se cruzan con ella-. Si coincidimos con ella en el ascensor, por ejemplo, siempre saluda con una sonrisa”. Eso sí, admiten que ahora la ven mucho menos, algo lógico si tenemos en cuenta que trabaja desde Suiza y que compagina su labor en La Caixa con su empleo en la Fundación Aga Khan. En ambas instituciones, la labor de la Infanta va dirigida a la defensa del medio ambiente y a la lucha contra la pobreza y la exclusión social de los más pequeños. Una de sus grandes batallas está en el campo de la vacunación infantil en países en vías de desarrollo.

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En esta nueva etapa, doña Cristina contará con Antoni Vila, el nuevo director general de la entidad, como nuevo jefe. Vila, licenciado en Ciencias Económicas por la Universidad de Barcelona, inició su carrera en La Caixa en 1985, como administrador territorial del grupo. “Supone una gran responsabilidad y un gran honor”, ha dicho sobre su nuevo puesto al frente de la dirección de la Fundación Bancaria La Caixa, "de la mano de Isidre Fainé”.

Giró ha estado al frente del departamento de la Infanta, decíamos, en los duros momentos. Y fue él precisamente quien declaró como testigo ante la Audiencia Nacional por las supuestas presiones de Manos Limpias para lograr la desimputación de la Infanta. Según las palabras de Giró, que se limitó a ratificar su anterior testimonio ante la policía, el secretario general de Manos Limpias, Miguel Bernad, nunca le pidió nada a cambio de retirar la acusación contra doña Cristina. Eso sí, el directivo reconoció varios encuentros con Bernad aunque, aseguró, nunca recibió ninguna amenaza o chantaje por parte del secretario general de Manos Limpias.

Ha sido acaso la imputación de la Infanta uno de los momentos más complejos de la carrera de Giró al frente de La Caixa. Ahora, con las aguas calmadas y con Urdangarin a punto de salir con permisos -y quién sabe si pronto con un tercer grado-, su sustituto tendrá que lidiar con un panorama mucho más tranquilo.