'The boss' Charlotte: baño de masas, regalos y un abrigo agotado en su debut de Navidad

A pesar de los grandes frentes que tiene abiertos la familia real británica, el príncipe George y la princesa Charlotte conseguían convertirse en los protagonistas de estas navidades con su debut este miércoles en la iglesia de Santa Magdalena, a la que cada año asisten los Windsor -o al menos parte de ellos- el día de Navidad. Los hijos mayores de los duques de Cambridge copaban toda la atención de los medios, eclipsando la ausencia de Meghan, Harry y Archie, la ausencia y polémicas del príncipe Andrés, y las noticias sobre la salud de su bisabuelo, el duque de Edimburgo, que salía solo unas horas antes del hospital para unirse a la Nochebuena en Sandringham.

Los dos hermanos se convirtieron en el gran reclamo para cientos de curiosos que se agolpaban a las puertas del templo para ver a los Windsor de cerca, algunos de ellos incluso llevando regalos para los más pequeños. Precisamente, Charlotte fue una de las destinatarias de los obsequios. A sus manos llegaron flores, una muñeca realizada a mano o un globo en forma de flamenco, que tomó y agradeció con un abrazo, en una imagen que se convirtió en unos de los momentos más emocionantes de la mañana, ya que la señora que se lo había entregado iba en silla de ruedas.

Una de las más fieles espectadoras de esta tradición anual es Karen Anvil, quien además hizo entrega a Charlotte de la mencionada muñeca. Esta británica, fan absoluta de la familia real, también habló con Sky News de la impresión que le había causado la hija del príncipe Guillermo y Kate Middleton, destacando su educación: "Se acercó con su mamá, cogió la muñeca y le gustó mucho. Estaba un poco seria, pero sus modales fueron perfectos". Gracias a las fotografías que tomó del momento, esta mujer se ha hecho conocida en todo el Reino Unido.

Una vez más, Kate Middleton apostó por la marca Amaia Kids, una de sus favoritas y que ha escogido en más ocasiones para vestir a sus hijos. La firma, propiedad de la guipuzcoana Amaia Arrieta, ya sabe lo que es sufrir el 'efecto Charlotte', cuando la pequeña ha lucido alguna de sus prendas, que además se fabrican en España. Y el abrigo que llevaba Charlotte en la misa de Navidad va por el mismo camino. Se trata del modelo Razorbil, fabricado en lana de oveja merina y de color verde botella, que se encuentra prácticamente agotado en la página web de la marca.