Decepción de Isabel II y estupor de Guillermo y Carlos: las reacciones al adiós de los Sussex
Al parecer, nadie de la familia real británica era consciente de la determinación de Meghan y Harry, y mucho menos de que planearan anunciarlo de forma tan inminente y unilateral
Tras la hecatombe que ha provocado el repentino anuncio del príncipe Harry y Meghan Markle sobre su nueva situación institucional, las reacciones no han tardado en llegar. Además del estupor que ha provocado, no solo en la prensa, sino también en la ciudadanía -con división de opiniones-, se esperaba una respuesta de la familia real, supuestamente enterada del movimiento. Y en un gesto sin precedentes en la monarquía británica, solo un rato después de que se publicara el anuncio oficial, el Palacio de Buckingham emitía un comunicado que no dejaba en muy buen lugar a la pareja.
"Las discusiones con el duque y la duquesa de Sussex están en una etapa temprana. Entendemos su deseo de adoptar un enfoque diferente, pero estos son problemas complicados que llevará tiempo resolver". Estas eran las palabras oficiales, que cualquiera puede leer en la página web de la Corona. Es decir, que sí se está hablando de su futuro más próximo, pero aún no había nada decidido. Y más aún, se entiende que Harry y Meghan no tenían, ni mucho menos, el beneplácito de la reina Isabel, tal como se podía pensar en un primer momento.
Al parecer, y según confirman varios medios británicos por fuentes internas de Buckingham, la monarca está "absolutamente decepcionada" con su nieto, especialmente por la premura con la que han lanzado el comunicado y sin que además lo supiera ningún miembro de la familia, incluyendo tanto a la reina Isabel como a los príncipes Carlos y Guillermo, los primeros en la línea de sucesión al trono y, por tanto, quienes más responsabilidades tienen con todo lo que pasa relacionado con la Corona. Y si ella está decepcionada, la palabra que usan los medios para la reacción de su hijo y su nieto Guillermo es "atónitos", sin que entiendan a quién le puede beneficiar que las conversaciones se lleven ahora de forma mucho más pública.
Este mismo miércoles, horas antes de que se hiciera oficial, algunos medios especulaban con esta posibilidad, afirmando que Meghan y Harry estaban en conversaciones con la Casa Real para tomar decisiones sobre su futuro más próximo, que podría incluir un traslado permanente a Canadá. Unas conversaciones que, según Buckingham, estaban en una fase muy temprana, por lo que nada hacía presagiar que la pareja daría este importante paso, sin precedentes, provocando tal malestar entre los familiares más cercanos del duque de Sussex.
Tras la hecatombe que ha provocado el repentino anuncio del príncipe Harry y Meghan Markle sobre su nueva situación institucional, las reacciones no han tardado en llegar. Además del estupor que ha provocado, no solo en la prensa, sino también en la ciudadanía -con división de opiniones-, se esperaba una respuesta de la familia real, supuestamente enterada del movimiento. Y en un gesto sin precedentes en la monarquía británica, solo un rato después de que se publicara el anuncio oficial, el Palacio de Buckingham emitía un comunicado que no dejaba en muy buen lugar a la pareja.