El regreso de Meghan Markle: la cuenta atrás para su reaparición en Reino Unido

Faltan apenas 24 horas para que volvamos a ver a Meghan Markle. Será en Londres, presidiendo junto al príncipe Harry la gala de los Endevour Awards, en lo que supone su vuelta a Reino Unido tras marcharse a Canadá el pasado enero después de anunciar su intención de salir de la Casa Real. Se da por sentado que su regreso al país tendrá lugar en las próximas horas, ya que ha apurado al máximo el tiempo con Archie, que no viajará con sus papás en esta última ronda de compromisos antes de su salida definitiva, el próximo 31 de marzo. Un primer compromiso en el que la expectación está servida y del que en Vanitatis les informaremos con todo detalle.

La Fundación Endevour es un patronazgo que los Sussex comparten con el príncipe Guillermo y Kate Middleton. Pero no coincidirán, ya que los Cambridge se encuentran de viaje oficial en Irlanda. Y es que, aunque ya en la edición del año pasado, solo asistieron Meghan y Harry, muchos han visto la programación del viaje como una 'conveniente coincidencia'. Lo cierto es que un viaje oficial de este tipo depende de muchos factores, por lo que es muy improbable que la fecha haya sido elegida solo para que no tuvieran que coincidir en esta cita, ya que además su encuentro es inevitable en los próximos días.

Meghan y Harry volverán a aparecer en público el sábado, durante el Mountbatten Festival of Music, un concierto benéfico ofrecido por el Cuerpo de Marines Reales, del que el duque de Sussex es aún capitán general, aunque pronto le tomará el relevo la princesa Ana, primera mujer de la Casa Real en asumir el cargo. De nuevo, una cita en la que no coincidirán con otros miembros de la familia, algo que no se dará hasta el lunes, cuando tendrá lugar el momento más esperado: la reunión del núcleo duro de los Windsor en la abadía de Westminster para asistir al servicio religioso por el Día de la Commonwealth.

Aunque es posible que Harry tenga programados más compromisos días después, esta cita se perfila como el último acto oficial de Meghan Markle dentro de la Casa Real. Además de que será la última vez que veamos a la exactriz como miembro de alto rango de la familia real, se da la circunstancia de que será la primera misa a la que no asistirá el príncipe Andrés, tras su salida de la Casa Real el pasado noviembre, por lo que no es un compromiso más de la agenda de Buckingham y se prevé una cita que puede ser todo menos típica.