"Paran un tsumani con una toalla": lo que no debe seguir haciendo Casa Real según dos expertos (y lo que sí)

La monarquía española se enfrenta a una nueva crisis institucional después de que hayan salido a luz unas cuentas opacas de don Juan Carlos. La justicia suiza tiene la mirada fijada en el Rey emérito y en varias de sus fundaciones de origen presuntamente sospechoso. De una de ellas es beneficiario don Felipe, quien el pasado domingo se defendía, comunicado mediante, explicando que era desconocedor de este hecho, además de renunciar a la herencia de su padre.

Todo esto sucede cuando el coronavirus copa toda la actualidad, una situación sin duda complicada para la familia real, que lejos de poder intentar levantar su imagen con apariciones, permanece confinada en Zarzuela como el resto de españoles. La Corona española ya vivió una grave crisis antes de la abdicación de Juan Carlos a causa del caso Nóos, pero la labor de don Felipe y doña Letizia había logrado cambiar la imagen de la institución.

Imagen que ahora vuelve a verse afectada por culpa de don Juan Carlos. La pregunta que seguro se están haciendo en Zarzuela es... ¿cómo resolvemos esta crisis? Para dar respuesta a esa cuestión, en Vanitatis nos hemos puesto en contacto con dos expertos en la materia. Una es Verónica Fumanal, consultora en comunicación política.

Cambios en la comunicación

"La Casa Real debería hacer un planteamiento global de su estrategia de comunicación. Cuando hubo el incidente entre la reina Letizia y la reina Sofía, se intentó solucionar con unas imágenes de las dos juntas visitando al rey Juan Carlos en el hospital, Letizia le abría la puerta del coche, se abrazaban… Eso está muy bien para una comunicación del siglo XX, cuando había dos revistas de papel cuché y un informativo de TVE. Pero en la era de las redes sociales, esto es intentar parar un tsunami con una toalla. Esas acciones intentan paliar una situación de crisis, pero las imágenes de la cacerolada del miércoles evidencian que hace falta mucho más", explica.

Según Fumanal, "la comunicación de Casa Real ya no puede ser unidireccional, debe ser mucho más empática, más global. Debe empezar a comunicar valores familiares de los nuevos tiempos, que son diferentes. Se pueden mantener los posados, pero además se pueden tener unas redes sociales mucho más activas, se puede normalizar mucho más ciertas cuestiones, como hacer unas pequeñas declaraciones en momentos importantes. No hace falta que todo sea vía comunicado, que Casa Real siempre tenga la negativa por respuesta… Si a los políticos se les pide que comparezcan todos los días y den ruedas de prensa, también a los monarcas se les puede pedir que hablen un poquito más, que se salgan de esos discursos tan del siglo XX, tan engolados y con esa retórica, porque ya nadie habla así. Básicamente, porque si no se adaptan a los nuevos tiempos, los nuevos tiempos no van a aceptar a una Casa Real así".

"La percepción de la institución es tan importante como su función. Y esto lo han entendido partidos políticos, las instituciones, los ministerios, los hospitales, los funcionarios y todos hacen una comunicación. Pero parece que los Reyes no lo han entendido o no se sienten concernidos, y la Casa Real debería sentirse más concernida que otras instituciones, porque otras instituciones, como el Gobierno, se legitiman cada cierto tiempo a través de elecciones, pero la Casa Real solo se puede legitimar a través de la percepción, porque no hay nada que evite que caiga un día", termina la experta.

"Debería liderar la crisis del coronavirus"

Por su parte, Santi Mollinedo, CEO de Personality Media, analiza la complicada situación que está viviendo Felipe VI. "Al Rey no le están dejando el espacio mediático que necesita ahora para lavar su imagen. Con el tema del coronavirus, él debería tener un papel más protagonista con el Gobierno, estando en las reuniones. Pero tiene varios problemas, uno de ellos es que el actual Gobierno no cuenta con él, ya que Pedro Sánchez lo ha dejado un poco de lado, y está perdiendo una de las grandes oportunidades de su reinado, el momento de su vida para ejercer de Rey liderando la crisis del coronavirus", nos explica.

Según Mollinedo, esta crisis de la Corona le ha venido en un muy mal momento "ya que todo el ruido del sector se lo está llevando el coronavirus. Los Reyes forman su propia marca y ahora es una mala situación para comunicar y venderse, también les está sucendiendo a otras marcas". Asimismo asegura que lo que tienen que hacer con don Juan Carlos es "alejarlo por completo. En estos momentos de debilidad ver que el Rey está a otras cosas no es bueno".