Muere Marcos Mundstock (Les Luthiers): el día que conoció a la reina Letizia

"El músico y humorista argentino Marcos Mundstock, miembro de Les Luthiers, ha fallecido a los 77 años tras sufrir durante un año una enfermedad 'irreversible". Así anunciaba la formación de cómicos, este miércoles, el fallecimiento de una persona muy querida en su entorno, alguien que llevaba tiempo sufriendo problemas de salud pese a ese sentido del humor que nunca lo abandonó. "Después de más de un año de lidiar con un problema de salud que se tornó irreversible, Marcos, nuestro compañero y amigo, finalmente partió. De ahora en más, cada uno de nosotros deberá empezar a transitar el doloroso camino de aprender a convivir con su ausencia", añadieron sus compañeros, que seguramente recuerdan el día que todos recibieron, de manos de nuestros Reyes, el premio Princesa de Asturias.

Fue en 2017 cuando Les Luthiers fueron agraciados con el Princesa de Asturias de Comunicación y Humanidades. Mundstock se involucró, como ningún otro premiado, con la idiosincrasia asturiana de la mano de los reyes Felipe y Letizia, que ejercieron, a través de la fundación, de perfectos anfitriones además de otorgarle el premio. La propia directora de la Fundación Princesa de Asturias, Teresa Sanjurjo, ha querido recordar aquel día de hace tres años. Según ella, Mundstock era "un músico y artista que estaba convencido de que el ejercicio del humorismo mejora la vida y nos permite contemplar la realidad de una manera más lúdica y lúcida". También ha recordado cómo se emocionó al visitar un colegio de Oviedo como parte de su tour por la ciudad asturiana.

El vínculo entre Mundstock, Les Luthiers y los Reyes no se limita a aquel día en el que otorgaron el premio a él y a sus compañeros. En marzo de 2016, un año antes del premio, la formación ofreció su espectáculo '¡Chist!' en el entonces llamado Barclaycard Center, el Palacio de Deportes de la Comunidad de Madrid, hoy WiZink Center. La sorpresa de los asistentes fue mayúscula cuando vieron entre el público a los mismísimos Reyes de España.

Fueron muchos los que se acercaron a ellos para compartir un rato de charla o hacerse el consabido selfie. “Fueron muy amables. No le dijeron a nadie que no y sonrieron ante tanto saludo”, aseguraba por aquel entonces a este medio uno de los asistentes. Los Reyes mostraron ya su predilección por el humor de Mundstock y los suyos haciendo algo que no siempre hacen: asistir a un espectáculo público como dos espectadores más.

Un año más tarde, la Reina entregaba un premio que Mundstock agradeció muy emocionado. El miembro más reconocido de este sexteto que nació de la coral de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Buenos Aires habló en su discurso de la vida y del sentido del humor para “contemplar las cosas de una manera distinta…, lúdica, pero sobre todo lúcida… a la cual no llegan otros mecanismos de la razón (...) El sentido del humor se aprende y se mejora con el tiempo. Nadie nace riendo".

Aunque nadie muere riendo tampoco, lo cierto es que el sentido del humor que ha acompañado a Mundstock hasta el final es el que lo mantendrá vivo para aquellos que lo admiraron, incluidos los Reyes de España.