Joaquín de Dinamarca recibe el alta: las recomendaciones médicas que debe seguir

La Casa Real danesa no ha dado demasiados pormenores sobre el estado de salud del príncipe Joaquín, quien sufría un ictus hace unos días. Una medida que se tomaba para preservar su privacidad en unas circusntancias muy delicado para él. Sin embargo, las buenas noticias proporcionadas por el equipo médico que le ha tratado si fueron compartiéndolas. Hace una semana, vía comunicado, la familia real daba la última hora del príncipe, que ya era muy esperanzadora y salió según lo previsto, pues el pasado 4 de agosto recibía el alta. Ahora ha sido su exmujer, la condesa de Frederiksborg, con quien tiene una notable relación, la que se ha pronunciado al respecto, pero vayamos por partes...

Fueron momentos de gran inquietud para toda la familia, pero, tras el susto inicial, se supo enseguida, que ni su movilidad ni su habla se han visto afectados y así lo hicieron saber: "Después de los últimos días de hospitalización y tratamiento en la unidad de cuidados intensivos, la evaluación de los médicos dice que el príncipe Joaquín no tendrá consecuencias físicas o de otro tipo como resultado del coágulo de sangre. El coágulo de sangre en el cerebro se debió a una disección repentina de una arteria, y el equipo médico del hospital estima que el riesgo de recurrencia es muy pequeño una vez que la arteria se ha curado".

Alexandra y Joaquín de Dinamarca juntos en el 18º cumpleaños del príncipe Nicolás. (Cordon Press)

Eran excelentes noticias para toda la familia del príncipe Joaquín, quién además, tal y como también anunciaba el comunicado, pronto podría salir de la unidad de cuidados intensivos, aunque destacaba que iba a seguir hospitalizado al menos "en el futuro cercano". Al mismo tiempo, solicitaban a los medios que estuvieran a la altura de su deseo de paz y privacidad. Además, agradecían todo el apoyo que tanto él como la princesa Marie habían estado recibiendo durante la convalecencia.

Quedaban aún por delante días de preocupación para el príncipe Joaquín y también para sus hijos, con los que mantuvo un contacto fluido desde el principio, como se ha sabido ahora. Pese a la inquietud, las buenas noticias médicas hacían que la familia estuviera llena de esperanza. La pareja tenía previsto volver pronto a París para que el hijo de la reina Margarita ocupara su puesto como agregado militar de la embajada. Unos planes que siguen vigentes, pero que tal vez sufran un pequeño retraso.

Necesita tranquilidad

De hecho, lo que le han recomendado al príncipe es la tranquilidad más absoluta y así lo han hecho saber. Con este fin, se ha trasladado al castillo de Cays, residencia que la familia real danesa compró en 1974 en Cahors (Francia), y que es el idílico escenario en el que estaban disfrutando de sus vacaciones.

Fue precisamente allí donde se encontraba cuando sufrió el accidente vascular que le llevó a ser ingresado e intervenido en el Hospital Universitario de Toulouse, horas después de haber atendido a un compromiso con un medio francés. Primero acudieron al hospital local de Cahors, desde el que fue trasladado al ya mencionado, más preparado para una situación de estas características. Los médicos que le atienden han considerado que la mejoría ha sido suficiente como para afrontar esta situación rodeado de su familia en su hogar.

En el comunicado la familia real danesa agradece el trabajo de los sanitarios, pero no se despejan más dudas, como si, por ejemplo, podrá retomar su actividad en París, aunque algunos medios consideran que si la evolución es buena podría volver en septiembre. Tenía previsto incorporarse el día 1, pero aún es prematuro par saber si será así.

Las palabras de Alexandra

Ahora ha sido Alexandra, condesa de Frederiksborg, la que ha emitido un comunicado publicado por la revista 'Billedbladet', la que ha narrado la inquietud con la que sus dos hijos, los príncipes Nicolás y Félix, han vivido estos días de incertidumbre: "Estamos muy aliviados ahora que Su Alteza Real el príncipe Joaquín ha recibido el alta médica. Fue algo que nos produjo un shock enorme, porque justo acabábamos de pasar unos días maravillosos juntos en el castillo de Cayx, para celebrar el cumpleaños del príncipe Félix. Por suerte, mis hijos han estado en constante contacto con su padre durante su hospitalización. El príncipe incluso les llamó el día de la operación, lo que significó muchísimo para ellos. Hoy, como todos los días, le mando mis pensamientos más cariñosos a toda la familia en Francia".