El despiste de Guillermo al olvidarse de Charlotte (y la rectificación de Kate)

Es habitual que Kate Middleton y el príncipe Guillermo hablen con naturalidad de su vida familiar y sus hijos durante sus citas oficiales, siempre y cuando no se trate de momentos muy solemnes y que se presten a conversaciones algo más distendidas. Por eso, los nombres de George, Charlotte y Louis salen a relucir a menudo en sus charlas. Eso mismo pasaba este martes, durante su visita a un centro de empleo de Londres, en lo que suponía la reaparición de la pareja después de un mes y medio sin un compromiso público conjunto.

Los duques de Cambridge estuvieron hablando con los responsables de esta oficina de empleo, que les explicaron cómo ayudan a los desempleados a encontrar un trabajo, algo nada fácil en estos tiempos de pandemia. Y les comentaron que, curiosamente, uno de los puestos que tiene actualmente más oferta es manejando máquinas de demolición, en el sector de la construcción, algo que les llamó mucho la atención e inmediatamente les trajo a la memoria a sus hijos. Fue Guillermo el que desveló entonces que a su hijo Louis le encantaría verlo, y que una de las cosas que más le gustan son las excavadoras. Kate no dudó entonces en intervenir: "No te olvides de Charlotte, a ella también le encantaría", recordando al príncipe Guillermo que sus hijos pequeños comparten ciertas inquietudes.

No fue la única anécdota que protagonizaron durante esta visita. Mientras hablaban con la gerente de una firma de decoración y bricolaje, les explicaron que había sido una de las empresas que más personal había contratado durante el confinamiento, ya que mucha gente había dedicado el tiempo de cuarentena a realizar diferentes trabajos en casa, cambiar decoración o arreglar desperfectos. Fue entonces cuando el príncipe Guillermo volvió a hacer gala de su sentido del humor: "Los hombres piensan que pueden hacer todo cuando se trata de bricolaje. Creo que por eso todo se derrumba".

Volviendo a la revelación sobre sus hijos, no es la primera vez que hacen alguna mención a su vida familiar o a los intereses de los pequeños. Gracias a una situación parecida hace unos meses, conocimos lo cariñoso que es Louis y el problema que suponía para ellos el que quisiera abrazar a todo el mundo, en un momento en el que la distancia social es más que recomendable. Tampoco han tenido problemas en confesar cuáles son sus canciones favoritas o con qué cuento consiguen que se duerman, tirando de absoluta naturalidad.