Guillermo y Máxima, Juan Carlos, Mary... Cuando la realeza tuvo que pedir perdón

“La tragedia griega”, ese es el nombre con el que la prensa de su país ha bautizado al último escándalo protagonizado por Guillermo y Máxima de Holanda y por el cual la pareja de royals ha tenido que salir al paso y pedir perdón públicamente.

La semana pasada, Guillermo y Máxima decidieron viajar a Grecia junto a sus hijas para disfrutar de unos días de vacaciones. Lo hicieron en plena crisis sanitaria. El gesto no gustó nada ni a la ciudadanía ni a los políticos de su país. Las críticas desde todos los sectores les llovieron como pocas veces se ha visto.

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N.Tiburcio

“Con pesar en mi corazón me dirijo a ustedes. Nuestro viaje a Grecia ha provocado fuertes reacciones de muchos holandeses. Duele haber traicionado la confianza en nosotros. A pesar de que el viaje estuvo en línea con las regulaciones, fue muy imprudente no tomar en cuenta el impacto de las nuevas restricciones en nuestra sociedad. Nuestra propia decisión de regresar se tomó al darnos cuenta de que no deberíamos haber ido”, comentó el rey en el comunicado que emitió.

No es habitual ver a un rey o a un miembro de la realeza pedir disculpas públicas, pero Guillermo y Máxima no han sido los primeros.

Memorables fueron las palabras pronunciadas en nuestro país por el rey Juan Carlos cuando se descubrió que en plena crisis económica había estado disfrutando de una cacería de elefantes en Botsuana en compañía de su “amiga entrañable”, Corinna Larsen. “Lo siento mucho, me he equivocado. No volverá a ocurrir”, dijo el monarca ante las cámaras, para asombro de todos.

Más reciente fue la disculpa pública que realizó Mary de Dinamarca. En su caso, la esposa de Federico usó las redes sociales en el mes de agosto para pedir perdón después de haber acudido al acuario Kattegatcentret para un acto sobre la naturaleza y las especies en peligro de extinción y estrechar allí la mano al director de las instalaciones delante las cámaras en plena pandemia de coronavirus. Además, Mary no hizo uso de la mascarilla.

“Ayer estuve en Grenaa para mi primera visita oficial después de las vacaciones de verano. En el mar y en el aire todo fue bien, pero en tierra cometí un error y desafortunadamente llegué a estrechar la mano. Esto me recuerda lo importante que es que nos ayudemos los unos a los otros a cumplir las recomendaciones. Cuídense y cuiden a los demás”, escribió en su cuenta de Instagram junto a una fotografía en la que aparecía con la mascarilla puesta.

En la familia real británica también ha habido miembros que se han visto obligados a pedir disculpas. Felipe de Edimburgo, por ejemplo, envió una carta a Emma Fairweather, la mujer que resultó herida en un accidente que el esposo de Isabel II provocó el 17 de enero de 2019. “Quiero que sepa cuánto lamento mi papel en este accidente. Solo puedo imaginar que no vi el automóvil que venía y estoy muy arrepentido por las consecuencias”, decía la misiva que hizo pública ‘The Sunday Mirror’.

Una disculpa era lo que el pueblo británico esperaba también del príncipe Andrés tras estallar el escándalo sexual del magnate Jeffrey Epstein. La amistad de años que unía a Epstein con el hermano del príncipe Carlos colocó a Andrés en el punto de mira. Una de las víctimas de Epstein lo acusó de agresión sexual. La polémica fue tal que el padre de Eugenia y Beatriz de York decidió sentarse frente a las cámaras de la BBC y ofrecer una entrevista para dar explicaciones. Todos esperaban una disculpa ante las víctimas por su amistad con Epstein y que condenara los hechos. Lejos de eso, Andrés justificó su amistad con el magnate y no se disculpó ante nadie.

Por último, muy reciente ha sido también la disculpa emitida por el príncipe Joaquín de Bélgica. El perdón llegó a principios del mes de junio, después de asistir a una fiesta privada en Córdoba. Con su viaje no respetó los protocolos de seguridad dictados por el Gobierno. El príncipe dio positivo por coronavirus días después. Su imprudencia y la del resto de asistentes provocaron uno de los rebrotes en la zona.

“Me gustaría disculparme por viajar y no haber respetado la medida de cuarentena. No tenía la intención de ofender o faltarle el respeto a nadie en estos tiempos tan difíciles y quiero lamentar profundamente mis acciones y aceptar las consecuencias”, declaró en la revista ‘People’.