Álvaro de Orleans-Borbón, de los vuelos del emérito a la relación 'tóxica' con Corinna

“Alfonso de Orleans y Borbón fue biznieto y nieto de reyes, sobrino del rey Alfonso XII y primo hermano del rey Alfonso XIII, con quien se crio de niño en palacio. Su relación con su sobrino-nieto, el rey don Juan Carlos I, fue siempre muy sincera y afectuosa, afecto con el que fue correspondido con creces por la familia real”. Así cuenta la Real Academia de Historia (RAH) la vida del duque de Galiera, abuelo de Álvaro Jaime de Orleans-Borbón. Álvaro, primo lejano del Rey emérito, está en el ojo del huracán por haber sido señalado como el hombre detrás de la presunta fortuna millonaria del rey Juan Carlos.

Ahora sabemos que el primo del Rey emérito está siendo investigado por la Fiscalía suiza, en una segunda pieza, por el uso de fondos y desvío de estos para los gastos de su primo tras su abdicación. La investigación suiza ha puesto sobre la mesa el patrimonio de Álvaro de Orleans. El primo del Rey se ha defendido en la prensa: "Pagué muchos vuelos privados al Rey emérito, pero no soy su testaferro".

¿Pero cuál es la relación real (que no real, de realeza) de estos primos? Todos los antepasados de Álvaro Jaime están entroncados con las casas reales europeas, en especial con la francesa. Hay que tener en cuenta, además, que uno de sus antepasados fue Antonio de Orleans, hijo del rey Luis Felipe I de Francia y padre de María de las Mercedes, esposa de rey Alfonso XII de España. Su descendencia heredó esa vocación de servicio a las grandes familias, tal como ha declarado Álvaro Jaime de Orleans-Borbón en varias entrevistas en las que dice que su vida y la de sus antepasados han estado siempre al servicio de las casas reales europeas.

Nos remontamos a principios del siglo pasado para comprobar cómo las relaciones entre ambas familias están enraizadas. Alfonso de Orleans y Borbón, abuelo de Álvaro Jaime, acompañó al rey Alfonso XIII en su exilio, y defendió a don Juan ante Franco, lo que le supuso su confinamiento en el palacio familiar de Montpensier, en Sanlúcar de Barrameda. “Se había casado en 1909 con Beatriz de Sajonia-Coburgo-Gotha, con quien tuvo tres hijos, Alfonso, Álvaro y Ataúlfo”. Alfonso, el padre de Álvaro Jaime, nació en el Palacio Edimburgo, en Coburgo, en 1910, durante el primer exilio de sus padres fuera de España, según detalla la RAH.

Boda en Roma

La base de las relaciones de los Orleans-Borbón con la Casa Real española viene de lejos, aunque se consolidó en Italia. En 1937, Álvaro, el padre de Álvaro Jaime, contrajo matrimonio en Roma con la italiana Carla Parodi Delfino, hija de una acaudalada familia de industriales, en presencia de los Reyes de España. En 1935, don Juan se había casado en Roma con María de las Mercedes Borbón de Orleans, entroncada con otra rama de la familia. Del matrimonio Orleans-Borbón Parodi-Delfino nacieron cuatro hijos: Gerarda (1939), Alfonso (1941-1975), Beatriz (1943) y Álvaro Jaime (1947). Este último es quien estos días copa las páginas de actualidad.

No es la primera vez, no obstante, que se habla del apellido por asuntos poco claros. En 2015, el apellido de la familia apareció involucrado en los Papeles de Panamá por un entramado societario en las Islas Vírgenes y en las Islas del Canal que fue presuntamente utilizado para realizar operaciones inmobiliarias en la costa gaditana. Pese a vivir en Mónaco, Álvaro Jaime, que es miembro del círculo de Corinna, tiene vinculaciones profundas con Cádiz, de ahí que los citados negocios tuvieran sus raíces en esa costa.

Padrino de la infanta Elena

Cabe recordar que del enfrentamiento con Franco por defender a don Juan, el patriarca se vio condenado al citado confinamiento en Sanlúcar de Barrameda, en la costa gaditana. En 1962 logró un permiso para viajar a Grecia y asistir a la boda de don Juan Carlos y doña Sofía, donde fue testigo. Un año después, el 20 de diciembre de 1963, volverían a reunirse en El Pardo con motivo del bautizo de la infanta Elena, de quien fue el padrino junto con María de la Mercedes. A partir de entonces, su forzado aislamiento en Sanlúcar se fue suavizando “con las frecuentes visitas de la joven pareja”.

Familia de pilotos

Familia de antepasados con sangre azul, es también aventurera. El abuelo de Álvaro Jaime fue un piloto avezado y profesional, pasión que legó a sus hijos. El 'primo' del rey Juan Carlos que hoy es noticia es piloto y campeón de vuelo. De su estrecha relación con don Juan Carlos, habló en la serie documental 'XRey', de Álvaro de Cózar y Eva Lamarca, un podcast de Spotify que en su capítulo 9 narra con crudeza los meses que el Rey emérito pasó con su ‘amiga entrañable’. "Yo estaba al corriente de todas las amistades del Rey, en este caso con Corinna, y tenía mis ideas sobre eso y no eran las más constructivas”. Álvaro de Orleans, primo del rey Juan Carlos y hombre de confianza durante años, ha hablado sobre la relación de don Juan Carlos y Corinna zu Sayn-Wittgenstein, “una relación que me daba escalofríos”.

En este capítulo recuerdan que el primo real pagó varios vuelos al emérito, desde 2005, por valor de tres millones de euros, lo que ha llevado a Orleans a tener que declarar en sede judicial. “Me salió el tiro por la culata, yo creo que ese dinero fue bien gastado, pero eso es una consecuencia, el objeto lamentable es la relación que causaron los vuelos, es lo que más me duele”. Además, el primo del Rey se muestra en todo momento muy afectado por la reina Sofía, de quien se declara “muy admirador”. Porque, además, la familia real griega y la familia de Álvaro de Orleans, según él dice, “estaban muy unidos”. “La situación de la Reina [Sofía] me ha causado un dolor muy fuerte, es una persona extraordinaria, la conocí de muy joven y siempre he admirado a esta persona”, confiesa.

En la boda de Felipe y Letizia

Criado entre Reino Unido y Mónaco, Álvaro Jaime está casado en segundas nupcias desde 2007 con Antonella Rendina y tienen una hija, Eulalia, a cuyo bautizo acudió el Rey emérito como padrino. Su primer matrimonio fue con la aristócrata italiana Giovanna Saint-Martine de Saint-Germain, sobrina carnal de la reina Paola de Bélgica. Con ella, con quien tuvo tres hijos (Pilar, Andrea y Louis), asistió a la boda de los entonces Príncipes de Asturias, don Felipe y doña Letizia.

De los cuatro hermanos, Alfonso, el segundo, murió. Gerarda, la mayor, vive en Londres, desde donde aparece en varias empresas offshore, según los Papeles de Panamá. Y la otra hermana, Beatriz, también vive fuera de España. Todos aparecen en el documento del BOE de 1996, en el que se inscribió la fundación familiar, la Fundación Infantes Duques de Montpensier, una casa aristocrática de origen francés cuyo nacimiento como ducado se remonta a 1539. La fundación que lleva su nombre y que gestionan los supervivientes de la familia está destinada a la gestión “de la colección de fondos documentales, artísticos e históricos iniciada por el duque de Montpensier y continuada por sus descendientes”.