El misterioso plan de fin de semana del rey Felipe sin Letizia: su entorno guarda silencio
El lunes, la Casa Real comunicaba que el Rey cancelaba sus actos institucionales porque debía guardar cuarentena. El misterio está en saber cúando y dónde se infectó
El lunes, la Casa Real comunicaba que el rey Felipe cancelaba sus actos institucionales. El motivo era haber estado en contacto con una persona contagiada por covid-19. El comunicado era breve. No había más información que este dato y el anuncio de las medidas sanitarias que proceden en estos casos: Felipe VI permanecería aislado durante diez días. No así la Reina, ni las hijas. La Princesa de Asturias y la infanta Sofía acudieron al colegio y mantuvieron su rutina académica. En el caso de doña Letizia, este miércoles cumplió con la agenda y viajó a Sevilla para inaugurar el Congreso Internacional de Tecnologías del Turismo.
El periodista Juan Luis Galiacho daba el nombre de Álvaro Fuster como el amigo cercano del Rey que habría dado positivo. Según la información que han facilitado a Vanitatis, el domingo por la noche Fuster comenzó a sentir los primeros síntomas de lo que podía ser covid-19. Fue entonces cuando comunicó la situación a don Felipe, que desde ese momento ha mantenido las pautas que marca el Ministerio de Sanidad.
El lugar y el motivo
Lo llamativo de la historia es cuándo y cómo sucedió la salida lúdica del Rey sin su familia. Vanitatis ha preguntado a varias personas del entorno del Rey, pero nadia sabe nada. Estas escapadas son más habituales de lo que se conoce. En ocasiones, estas diversiones de hombres solos se han hecho públicas, como cuando acudió a esquiar con su primo Beltrán Gómez-Acebo y Pedro López Quesada en marzo de 2019. Y dos meses después, también sin la reina Letizia, se reunía en el restaurante Punto Básico con algunos de los compañeros de su infancia y juventud del colegio Santa María de los Rosales. Ese día, los hermanos Fuster también compartieron ese encuentro nostálgico. Aunque Ricky es cinco años mayor que Álvaro, suele formar parte de las reuniones y celebraciones del matrimonio Borbón Ortiz en la Casa de Asturias, que así llamaban en su día al pabellón real.
El misterio de cómo y dónde estuvieron juntos los amigos es uno de los interrogantes que rodean esta historia. A diferencia de otras ocasiones, donde se filtra la información (a veces de manera interesada para mostrar el perfil familiar del Rey), esta vez hay un muro de protección total. Se barajan varias alternativas de ese fin de semana secreto donde las posibilidades tampoco son muchas: desde su participación en una montería hasta una reunión solo de chicos. Dos actividades en las que la reina Letizia no habría participado, y de ahí que no tuviera contacto con Fuster.
Salvo cuando era novia del Príncipe y le acompañaba en las jornadas cinegéticas (por aquello de que era una de las aficiones tanto de don Juan Carlos como del propio Felipe VI), en realidad a la Reina nunca le gustaron estas compañías y aprovechaba para montar a caballo mientras el resto del grupo cazaba. Cuando nació la infanta Leonor, abandonó definitivamente esas salidas a los cotos: La Flamenca, en Aranjuez, y la Encomienda de Múdela, en Campo de Calatrava, son algunos de los campos cercanos a Madrid donde la presencia del rey Felipe era habitual, igual que la de su hermana la infanta Elena y el propio Rey emérito.
