Trabajadores de Kensington aseguran haber sufrido "bullying" por parte de Meghan Markle

Semana intensa para los Windsor. A cuatro días de que se estrene la entrevista de Oprah Winfrey al príncipe Harry y Meghan Markle y mientras el duque de Edimburgo sigue ingresado en el hospital, el diario británico 'The Times' ha revelado una importante información que no deja a la duquesa de Sussex en muy buen lugar. Según el citado medio, varios trabajadores de Kensington Palace denunciaron a sus superiores un trato vejatorio por parte de la exactriz durante sus jornadas laborales.

Todo ocurrió en octubre de 2018. Las dos víctimas del presunto "bullying" de Meghan Markle, que prefieren mantener su anonimato, informaron sobre el dudoso comportamiento de la duquesa a Jason Knauf, el por entonces jefe de comunicación de los Cambridge y los Sussex antes que decidieran separar sus oficinas. Knauf no dudó entonces en informar a Buckingham sobre el problema que se le presentaba.

Siempre según 'The Times', cuando el príncipe Harry se enteró intentó interceder por el bien de su esposa, y le pidió a Knauf que no informara a la oficina de su abuela para evitar mayores problemas. Kanuf decidió entonces contar lo sucedidio a Simone Case, el entonces secretario personal del príncipe Guillermo, después de varias conversaciones con Samantha Carruthers, la jefa de recursos humanos de Kensington y Clarence House en aquella época.

En el email de Kanuf a Simon Case, este le contaba que Samantha Carruthers coincidía con él acerca de que se trataba de una situación muy seria. Y añadía: "Estoy preocupado por si finalmente no se hace nada con este caso". Y así fue, tal como confirman fuentes cercanas a los protagonistas a 'The Times', asegurando que en ningún momento se protegió al staff. Aparte de estas dos personas que denunciaron internamente el comportamiento de Meghan, otro extrabajador declara al citado medio que fue "humillado" por la duquesa y que incluso algunos "temblaban" ante su presencia.

La respuesta de Meghan no se ha hecho esperar. Un portavoz ha afirmado que "se trata de una campaña de desprestigio basada en la desinformación. [...] La duquesa está triste tras este último ataque, sobre todo al ser ella una persona que ha sufrido bullying en sus propias carnes y está volcada en apoyar a aquellos que también han sufrido este dolor y trauma. Está convencida de continuar su trabajo alrededor del mundo y quiere seguir siendo un ejemplo haciendo lo que es bueno y correcto".