El nuevo y espectacular collar de zafiros de Máxima de Holanda, una joya con historia

Este año, la celebración del Día del Rey, fiesta nacional de Holanda y aniversario del soberano, ha sido espectacular. Ya que en 2020 no pudieron hacerlo debido al confinamiento de la pandemia, en 2021 han querido tirado la casa por ventana desplegando todo su poderío mediático... y fashion. Quizá así la popularidad de los reyes, algo maltrecha en los últimos tiempos, suba unos puntos.

De nuevo, Máxima sorprendió a propios y extraños con su versatilidad: elegancia royal por la mañana vestida de Natan, glamour hollywoodiense por la tarde para asistir al concierto virtual de The Streamers, celebrado en en el palacio de Noordeinde, en La Haya. La reina, muy criticada por el sueldazo que recibe de las arcas del Estado, no quiso estrenar, sino que rescató un espectacular mono negro de Elie Saab con mangas de encaje que ya había lucido anteriormente. Encima, una de esas capas que tanto le gustan. En los pies, botines cómodos para poder bailar y saltar.

Sin embargo, lo más especial y lujoso del estilismo casi no se veía, pero tiene importancia. La esposa de Guillermo de Holanda llevaba un collar de la firma Royal Asscher con forma de tres lágrimas unidas y en la inferior, la más grande, un globo giratorio relleno de zafiros. Al margen del dineral que debe costar la pieza, todo hace pensar que se trata de un regalo de la reina Beatriz a su nuera. Tanto el rey como sus dos hermanos tienen gemelos de esta marca con la misma esfera de zafiros, que han sido obsequio de su madre, así que el collar de Máxima también podría serlo.

Aunque la reina, en esta ocasión, no nos deleitó con ninguna prenda de firma española, nuestro país estuvo muy presente en el Koningsdag gracias a sus hijas. La princesa Amalia se decantó por un abrigo en color crudo de Massimo Dutti y top dorado de Zara para asistir al citado concierto. Unos pantalones culotte y unos zapatos metalizados de Jimmy Choo completaban un look perfecto.

Su hermana pequeña, Ariane, también eligió al gigante Inditex para su look: pantalones con abertura de 25,95 euros y camisa blanca. Aún hay más, porque por la mañana había llevado unas cuñas de Castañer. ¡Moda española a tope! Por su parte, la princesa Alexia, que para su primer posado ya había calzado unas sandalias de Zara, volvió a confiar en la firma de Amancio Ortega por la tarde con unos leggings de cuadros, que combinó con un top negro de mangas abullonadas de H&M y deportivas Nike.

Fue una jornada ajetreada, en la que visitaron varias ciudades protagonizando momentos inolvidables para los holandeses… y para los fotógrafos. Como la escena de ver al rey Guillermo conduciendo un coche antiguo, con la princesa Alexia como copiloto, por las calles de Eindhoven. El vehículo, un DAF AA 98 antiguo, forma parte de la exposición del museo de la citada localidad y perteneció a la Casa Real, que lo utilizaba para desplazarse durante sus vacaciones en la Toscana, donde la madre de la reina Beatriz, Juliana, tenía una casa.