Kate Middleton, aislada por contacto con un positivo (y muchos planes cancelados)

El pasado viernes, Kate Middleton hacía su aparición estelar en el torneo de Wimbledon, la que es una de sus citas favoritas del año. Allí pudo disfrutar de varios partidos de tenis, hablar con los responsables del torneo y también visitar las cocinas, que tanto trabajo han realizado para hacer menús durante la pandemia, convirtiéndose ella misma en una improvisada pinche. A priori, iba a ser la primera de varias visitas que iba a realizar al campeonato, puesto que casi siempre asiste a las semifinales y la final. Pero finalmente no va a ser así. Este mismo lunes, el Palacio de Kensington ha informado de que Kate se encuentra aislada por un contacto con un positivo. Así que nos tenemos que despedir de volver a verla en las gradas y en las diversas citas oficiales que tenía esta semana.

"La semana pasada, la duquesa de Cambridge entró en contacto con alguien que posteriormente dio positivo por covid-19. Su Alteza Real no está experimentando ningún síntoma, pero sigue todas las pautas gubernamentales pertinentes y se aísla en casa", reza el comunicado de Kensington. Toda precaución es poca y, aunque Kate Middleton ya ha recibido las dos dosis de la vacuna, ha preferido optar por el confinamiento para evitar posibles contagios. Así que también ha tenido que anular su asistencia a los actos de celebración del 73º aniversario del Servicio Nacional de Salud británico este mismo lunes, una misa de acción de gracias en la catedral de San Pablo y una fiesta del té en el palacio de Buckingham, en la que iba a ejercer de anfitriona junto al príncipe Guillermo.

Lógicamente, no se han dado detalles de cuándo o cómo entró en contacto con esa persona, aunque todo apunta a que fue en el torneo de Wimbledon, ya que fue una cita a la que acudió en solitario, mientras que su anterior compromiso, días antes en el estadio de Wembley para disfrutar del partido entre las selecciones de fútbol de Inglaterra y Alemania, estaba acompañada del príncipe Guillermo y el príncipe George, que por lógica también hubieran tenido que confinarse. El hecho de que en Reino Unido las mascarillas no sean obligatorias en espacios al aire libre -independientemente del aforo o la distancia interpersonal, a diferencia de nuestro país- no le ha valido a Kate Middleton para salvarse de las críticas por no usarla, no solo en esta ocasión, sino también en apariciones anteriores.

Y lo cierto es que los Cambridge no son nada ajenos al covid. Era marzo de 2020, en plena crisis, cuando conocíamos que el príncipe Carlos se había contagiado y permanecía aislado en su residencia de Highgrove House, con síntomas leves y atendido y controlado por su equipo médico. Poco después, era el príncipe Guillermo, aunque en su caso no se supo hasta muchos meses después, lo que también levantó cierta polémica. Curiosamente, aunque es más joven, sus síntomas fueron algo más preocupantes que los que tenía su padre, llegando a tener en alguna ocasión dificultades para respirar. Eso sí, el tener coronavirus no le impidió seguir con su vida normal -todo lo que se puede considerar 'normal' en ese momento- y atender sus citas, reuniones y compromisos a distancia. Un método que también tendrá que seguir Kate Middleton mientras siga aislada por su contacto con un positivo.