Charlène de Mónaco aclara todas las dudas: por qué no regresa a casa y la verdad de su dolencia

Aún no nos hemos recuperado de la impactante portada de la revista alemana 'Bunte' que anunciaba la separación definitiva de Alberto y Charlène de Mónaco cuando llegan nuevas declaraciones de la princesa. Ella ha hablado alto y claro desde Sudáfrica de la situación que está viviendo y, de paso, ha despejado muchas incógnitas. La primera, los detalles exactos de la enfermedad que la mantiene ‘atrapada’ en su país de origen desde hace varios meses.

Ella misma ha explicado en el canal Channel 24 que sufre una infección de oídos, nariz y garganta causada tras una intervención dental que se realizó antes de viajar. Este es el detalle que nos faltaba por conocer para entender bien el alcance de su dolencia. La cuñada de Carolina de Mónaco se habría sometido a una elevación del seno maxilar para colocar un injerto con el fin de poner un implante y esto le produjo una grave infección. Este tipo de intervenciones son delicadas. Sin embargo, no se dio cuenta de esta complicación hasta que empezaron a dolerle mucho los oídos, ya en Sudáfrica, y tuvo que visitar a un especialista.

Desde entonces sigue un tratamiento y ha sufrido diversas complicaciones. El motivo por el que no regresa a casa es estrictamente médico: “La presión de mi oído no se estabiliza, lo que significa que no puedo volar por encima de los 20.000 pies”. De todos es sabido que es muy peligroso coger un avión teniendo problemas de oído. Aunque echa muchísimo de menos a su marido y sus dos hijos, Jacques y Gabriella, Charlène asegura en estas nuevas declaraciones que ellos están planeando un viaje para poder ir a visitarla, aunque precisa que las cosas están resultando complicadas por las restricciones del covid.

Esto echaría por tierra las informaciones sobre una posible ruptura definitiva de la pareja. La princesa no ha dudado en expresar públicamente sus verdaderos sentimientos hacia su marido: “Alberto es mi roca y mi fuerza y ​​sin su amor y apoyo no habría podido superar este momento doloroso”. Su enfermedad no solo la mantiene lejos del principado, también le ha impedido estar con el príncipe para celebrar un momento muy especial para ambos. “Lo que ha sido extremadamente difícil para mí fue cuando mi equipo médico me indicó que no podía regresar a casa para mi décimo aniversario de boda”, aseguraba en el mismo medio sudafricano hace unas semanas.

Mientras los médicos no le den permiso para volar, Charlène de Mónaco seguirá lejos de los suyos. Menos mal que las videollamadas que hace con sus pequeños, la ayudan a mitigar un poco la nostalgia. La hemos visto en su Instagram en uno de estos dulces momentos, enviando besos virtuales a Gabriella y Jacques mientras cose unas mantas “para la guardería de al lado”, según explica en el post.

La princesa sigue muy activa en las redes sociales, desde donde ha dado las gracias por todo el cariño recibido y por las felicitaciones por su aniversario de boda, el pasado 1 de julio. “A todas nuestras familias, amigos y seres queridos. Gracias por su amor y apoyo, y por la generosidad que hemos recibido durante esta década de nuestro matrimonio. Con gratitud, podemos continuar nuestro trabajo a través de nuestros cimientos. Gracias por los obsequios de aniversario, por su generosidad y confianza”.