Las fotos de Alberto de Mónaco y los mellizos en Francia tras su visita exprés a Charlène en Sudáfrica

Apenas una semana. Eso es lo que han estado Alberto de Mónaco y sus mellizos en Sudáfrica junto a la princesa Charlène. Un periodo de tiempo muy breve teniendo en cuenta que no veían a la princesa desde principios de junio. Esta información ha echado más leña a los rumores de divorcio entre el matrimonio, que cada vez suenan con más fuerza. Y es que a nadie le pasa por alto que Charlène, quien se encuentra enferma en el país africano, apenas ha estado con sus hijos, Jacques y Gabriella, de seis años, desde que empezó su calvario en abril.

En estos cuatro meses que la exnadadora lleva en Sudáfrica, país que no puede abandonar ya que por la infección ORL que sufre, y por la que fue intervenida recientemente en una operación con anestesia general de cuatro horas de duración, le es imposible coger un vuelo, la princesa solo ha recibido dos visitas de su familia, una en junio y la otra hace una semana. Dos viajes ambos breves que sorprenden aún más sobre todo por las horas de vuelo que separan Mónaco de Sudáfrica, nada más y nada menos que 12.

Pero unas imágenes de Alberto con sus mellizos tomadas este fin de semana en la localidad francesa de Saint-Vincent-de-Cosse, disfrutando de un día de actividades en canoa, confirman que Charlène vuelve a estar sola en Sudáfrica, sin su marido y, lo que llama más la atención, sin sus hijos, de los que apenas ha podido disfrutar en casi medio año. Una situación, cuando menos extraña, que nadie acaba de entender y que desde el palacio de Mónaco se niegan aclarar, siempre manteniéndose en un absoluto silencio.

Las fotografías que la propia Charlène publicó la semana pasada con motivo de la visita de su marido y sus hijos a Sudáfrica tampoco lograron el objetivo de calmar las aguas. Al contrario. En las primeras imágenes, en las que aparecían con sus mellizos, veíamos a la pareja distanciada, sin contacto físico y con un Alberto con gesto molesto. A las pocas horas, y quizás dándose cuenta de esos detalles, la princesa publicaba dos nuevas instantáneas, esta vez en actitud cariñosa con su marido, al que abrazaba por la cintura. Sin embargo, nada es incapaz de parar ya estos rumores de divorcio.

Sobre todo mientras Charlène sigue sola en Sudáfrica y su familia en Mónaco. Tal como reveló la propia princesa, hasta por lo menos octubre no prevé que puede volver al principado, así que le queda por lo mínimo otro mes y algo más en el país que la vio nacer.